[Ro 12:2]
15-03-2009 | Rev. Jaerock Lee
La Escritura de Hoy
Romanos 12:2 "No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta."
Amados Hermanos en Cristo, Público Televidente y miembros de las miles de iglesias que están presenciando este servicio en Corea y alrededor del mundo o que lo están escuchando por cintas de audio.
El pasaje de hoy en Romanos 12:2 dice "No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta."
Hoy en día, el mundo está lleno de pecado y hay una tendencia muy fuerte por vivir sólo satisfaciendo los deseos de la carne.
La gente ni siquiera se da cuenta que está viviendo en maldad; y es muy difícil en la actualidad encontrar verdadera bondad.
JAMÁS hermanos se dejen llevar por los apetitos carnales de este mundo. Deben apartarse como hijos de Dios y vivir en fluir del espíritu. Debemos saber distinguir la buena, agradable y perfecta voluntad de Dios y vivir de acuerdo a ella.
Es mi deseo que a través de los ejemplos de bondad que voy a compartir con ustedes de algunos personajes de la Biblia, puedan examinar su corazón y, asimismo, lleguen a entender lo que es la BONDAD para Dios.
Al igual que las prédicas sobre "Espíritu, Alma y Cuerpo"; estos mensajes sobre "La Bondad" le ayudarán a llegar al nivel del espíritu; y del perfecto espíritu.
Estos sermones están muy relacionados con aquellos que predique el año 1997, durante una campaña de avivamiento. En ese entonces, oí que estos mensajes habían servido a muchos hermanos para crecer en su vida cristiana.
Quizás en ese momento usted creía: "Es muy difícil que llegue a ese nivel de bondad. ¿Tal vez algún día lo haré?" Sin embargo, solo piense en el tiempo transcurrido. Ahora, ya puede hacerlo. Estoy seguro que todos me responderán con un fuerte: AMEN. YO LO PUEDO HACER." Y de seguro lo lograrán.
Tal vez creía que vivía una buena vida cristiana. Pero entonces, se dio cuenta que había algo que le faltaba alcanzar. Por ello, se arrepintió, y una vez más se decidió a llegar a un nivel mayor de BONDAD.
Hermanos: ¿Cuál es su nivel de BONDAD?
Hay algunos que vienen para que ore por ellos. Y me dicen: Rev. Oro todos los días, vengo a los cultos, soy fiel en mi servicio a Dios: ¿Por qué, entonces, no puedo sanar de esta enfermedad?
Si usted es uno de ellos, por favor examine en que nivel de bondad está ahora. Si ya tiene muchos años de cristiano, y ha servido en la Iglesia, si es un líder, un anciano o un siervo de Dios, debe haber crecido en su nivel de fe y de bondad; y debe reflejar a Dios.
Reflejar a Dios es la verdadera esencia de la vida cristiana. Ser cristiano es asemejarnos a nuestro Padre celestial y a nuestro Señor. Tan solo ir a la iglesia y servir en ciertas labores o ministerios no es vivir una verdadera vida cristiana.
Creo que no hay ningún padre que sólo quiera que sus hijos vayan al colegio. Desearán que sean buenos estudiantes, y que luego ingresen a la universidad y estudien una profesión. Y después que consigan un buen empleo y que tengan una vida de éxito.
Hermanos: Estos mensajes contienen puntos muy importantes que les mostrarán como fluir en el espíritu. Si graba en su corazón estas enseñanzas y las pone en práctica, Dios lo aprobará como un siervo de espíritu perfecto.
Espero que, a través de estos mensajes, lleguen a discernir cuál es la buena voluntad de Dios y a actuar con bondad para así agradar a Dios.
Oro en el nombre del Señor para que alcancen este nivel del espíritu y del perfecto espíritu y así puedan glorificar a Dios y recibir todas las bendiciones que Dios ha preparado para ustedes.
Hermanos:
Les he dicho en anteriores oportunidades que una vez que han alcanzado el espíritu; su conocimiento, su educación, su procedencia y sus habilidades no importarán.
Dios los guiará como a verdaderos hijos para bendecirlos. Dios lo hará. Lo hizo conmigo. Él es nuestro Padre quien nos guía a la bendición. En mi caso, Dios me bendijo, justo después de haber alcanzado el nivel del espíritu. Y es porque obedecí Su Palabra y permanecí en ella. Y esto no sólo se aplica a mí. También se aplica a todos ustedes.
Estimado Público:
Para que fluyan en el Espíritu, deben saber cuál es la buena voluntad de Dios y actuar de acuerdo a ella.
Pero para poder hacerlo, debemos tener un modelo o ejemplo de bondad
Todos quieren ser bondadosos. ¿Cierto? Todos desean ser buenos. Y como nuestro Dios y Padre es bueno, desean reflejar esa misma bondad. ¿Verdad?
Pero no han tenido un modelo para discernir lo que es bueno de lo que no lo es. Por eso, Dios nos ha dado Su modelo. Él nos dice lo que es la verdadera BONDAD y nos da la norma de esa bondad para así examinarnos y preguntarnos: "¿He sido realmente bondadoso en mi vida? Y si es así. ¿Cuál es mi nivel de bondad? De esta manera, podrá examinarse.
Sólo cuando conocemos la perfecta bondad, podremos distinguir lo que es en verdad la bondad comparándola con ese modelo o norma.
En Lucas 18:18, un hombre llama a Jesús: "... Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?" Entonces, Jesús le responde en el versículo 19: "Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo Dios."
Si. Hermanos: Sólo Dios es en verdad BUENO. Y solamente la Palabra de Dios: La Biblia, es nuestro modelo de BONDAD.
Desde luego, nuestro Señor Jesús y el E.S. son uno con Dios, y por eso su corazón también son uno en bondad. No obstante, en este versículo Jesús nos dice: "Ninguno hay bueno, sino sólo Dios."
Y es porque en esa época la gente no sabía que Jesús era el Hijo de Dios, sino más bien lo consideraban tan solo un hombre; es decir, un simple ser humano. Por ello, al decir que solo Dios es bueno, Jesús decía que el hombre, como simple criatura, no tiene ninguna posibilidad de comprender y menos alcanzar esa absoluta BONDAD.
Recordemos que aun cuando Jesús no tenía pecado, vino a esta tierra para redimir a la humanidad de sus pecados. Y no fue hasta que culminó la providencia de la salvación en la cruz, que llegó a ser el sacrificio expiatorio que llevó la carga de los pecados de toda la humanidad. Por eso- en ese momento- Jesús no dijo que Él era bueno.
Pero luego que cumplió Su propósito en este mundo y resucitó de entre los muertos y llegó a ser el Salvador, Su nivel de bondad fue el mismo que el de Dios PADRE. De la misma forma, como el corazón del E.S. es perfectamente bueno, cuando los hijos de Dios que han recibido el E.S., obedecen y siguen Su dirección, todos pueden tener este corazón de perfecta bondad.
¿Acaso la Biblia no lo dice cuando cita: Cuando la Palabra de Dios permanece en nosotros, somos uno con el Señor y con Dios Padre?
Estimado Público:
La bondad de acuerdo a la perspectiva del mundo y la bondad según la norma de Dios son completamente diferentes.
Luego de haber escuchado y aprendido la Palabra de Dios, se pueden haber dado cuenta que muchas de las cosas que habían considerado como buenas en realidad no lo son.
Aunque haya vivido una vida relativamente buena en este mundo, cuando el E.S. ilumina su corazón con la perfecta norma de bondad, podrá entender que aun tiene muchas áreas que todavía no son buenas. Ahora bien: ¿Que clase de persona se considera BUENA en este mundo?
El diccionario define la palabra BONDAD como: "Cualidad o estado de ser bueno o carácter o tendencia a ser bueno:"
Hermanos: La gente escoge lo que más le conviene. Y lo hace de acuerdo a su propio criterio. Los que se consideran buenos también escogen lo que es bueno conforme a su razonamiento. ¿Verdad? Y forman su conciencia mezclando esta clase de criterio vago y relativo con sus propios criterios.
En otras palabras, crean su propia conciencia. Y disciernen lo bueno de lo malo de acuerdo a sus propios criterios de conciencia. Como cada uno tiene una conciencia diferente, sus criterios también serán diferentes.
Todos tienen diferente nivel de conocimiento y provienen de distinto entorno y trasfondo familiar. Además, han recibido diferentes clases de enseñanzas. Todo ello los hace diferentes. Por eso, lo que algunos consideran como bueno o bondadoso, tal vez no lo sea para otros. Por ello, la conciencia del ser humano no puede ser la norma o criterio perfecto de bondad.
Como ya hemos compartido en las prédicas sobre espíritu, alma y cuerpo; la conciencia es una mezcla de verdad y falsedad; en otras palabras, hay una mente blanca y otra negra. Desde su nacimiento y luego cuando crecen, las personas mezclan la verdad con la mentira; y forman su propia escala de valores según la cual definen lo que es verdadero o no.
Por ello, en la conciencia hay una parte de mentira, y esa parte varía de acuerdo al país, al lugar y a la edad. Incluso en el mismo lugar y tratándose de personas de la misma edad, cada caso es diferente.
Dependiendo de la familia, educación, enseñanzas; todo es diferente.
En resumen: Lo que para unos, es un acto de bondad, para otros, no lo es. En algunos países, una acción puede ser considerada como un gesto bondadoso. No obstante, en otros no lo es. Más aún, este criterio puede llegar a cambiar con el tiempo. Dependiendo de la época en que vive, todos estos patrones pueden variar.
En conclusión: La conciencia JAMAS puede ser el modelo o criterio a seguir.
El único criterio o norma de BONDAD es la Palabra de Dios, la cual nunca cambia.
Repito: El criterio que la gente acepta como norma para medir la bondad; y el modelo de bondad de acuerdo a la Palabra de Dios es completamente diferente.
Por ejemplo: En algunas novelas, implícitamente se dice que la venganza es una opción legítima. Más aun, se llega a establecer, por ejemplo, que es justo que un niño vengue a sus padres.
Ya saben a lo que me refiero. Los padres son asesinados. Pero antes de morir le piden a su hijo: "Por favor: Hijo. Jura que nos vas a vengar." Aun en el lecho de muerte piden algo malo. Pero lo que no se dice es que la venganza traerá más tragedia.
Por ello, Dios dice que es malo vengarse y que perdonar es un acto de bondad.
Mateo 5:43-44 "Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen."
Dios dice que debemos amar a nuestros enemigos. Se imaginan la maldad que hay en nosotros que no podemos amar ni aun a los que no son nuestros enemigos. Repito: Dios nos dice que amemos a nuestros enemigos. Y nosotros no amamos ni siquiera a nuestros hermanos en Cristo, a nuestra familia. No amamos ni aun a los que no son nuestros enemigos. ¡Qué maldad hay en nosotros! ¿Verdad?
Mas aun: Dios nos dice que debemos orar por aquellos que nos insultan. Le pregunto: ¿Cómo podemos orar por ellos? Tal vez así: "Dios. Alguien me insulta y me molesta. Por favor acaba con esa persona." ¿Así debemos orar por ellos?
No. Deberíamos de orar de esta manera: "Padre. Por favor da gracia a esta persona. Alivia y tranquiliza su corazón de toda carga. Te ruego, dame sabiduría para estar en paz con ella." Así deberían de orar. Debe orar para que Dios lo bendiga.
La pregunta es: ¿Están haciendo esto o No? Esta es la Palabra de Dios y es lo básico. Se han preguntado: ¿Qué le pasaría si no obedecen ni aun lo elemental de la Palabra de Dios?
¿Por que le es tan difícil obedecer? Tan solo debe decir AMEN y obedecer porque es la Palabra de Dios. Quizás pueda haber odiado a otras personas antes de conocer la verdad. Sin embargo, ahora NO DEBE ODIAR. Ni aun a sus enemigos. Se imagina qué bueno sería si fuera donde ellos, hiciera las paces y orara para que Dios los bendijera.
Romanos 12:20 señala "Así que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de beber; pues haciendo esto, ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza."
Dios nos dice que debemos dar de beber a nuestros enemigos. Tal vez me diga: "Rev. Pero si no quiero ni ver a esa persona. Quiero que todo le vaya mal." No debe pensar así. Si a su enemigo no le va bien, o si tiene hambre o sed; deberá de alimentarlo y ayudarlo. Porque la Palabra dice: "...pues haciendo esto, ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza."
Y así podrá estar en paz con él. Cuando amamos y perdonamos incluso a nuestros enemigos, aún la tragedia más grande en nuestra vida pasará. Por ello, deben aprender con mucha dedicación la Palabra de Dios, que es nuestro modelo de perfecta bondad. La Palabra contiene el corazón de Dios, quien es todo bondad.
También deben poner en práctica lo que han aprendido y grabarlo en su corazón para así alcanzar la completa y verdadera bondad. No obstante, en este proceso hay algunos pasos a seguir.
Incluso en la fe hay diferentes niveles. Está la fe de un nuevo creyente quien recién es salvo. Y también la fe de quien ha alcanzado la madurez espiritual. Cuando llega a este nivel de fe perfecta, lo que menciona Jesús en Marcos 16:17 se hace realidad: Es decir: Y estas señales seguirán a los que creen..." Y luego el pasaje cita esas señales. Esas señales los seguirán. AMEN
En la actualidad, muchas personas dicen que creen en el Señor: Numerosos siervos de Dios dicen que creen. Me pregunto: ¿Por qué esas señales no les siguen? Deberían darse cuenta que algo anda mal. Tal vez lo que predican no es del todo correcto.
La Palabra de Dios jamás se equivoca. Todo lo que viene de Dios es bueno. Entonces: ¿Por qué esas señales no acompañan a los que dicen que creen? ¿Por qué juzgan y condenan a los siervos que SI manifiestan esas señales? Debe haber algo erróneo en su creencia. ¿Por qué la Palabra de Dios no se hace realidad en ellos? ¿Por qué muchos hermanos de esta Iglesia manifiestan esas señales? ¿Acaso no es porque tienen una fe perfecta? Si tuvieran una fe perfecta: ¿Acaso juzgarían y condenarían? ¿Cómo pueden atreverse a ser jueces? Solo Dios es juez. Sin embargo, ellos no se percatan de su maldad aun cuando están actuando con maldad. Realmente, no puedo entender lo que predican. Realmente NO PUEDO ENTENDERLO.
Retomando el mensaje: Al igual que para ir del primer al segundo piso tenemos que subir escalones; hay también escalones para llegar al nivel de la perfecta bondad.
A partir de ahora, compartiré los 4 diferentes niveles en el proceso de alcanzar la perfecta bondad.
El primer nivel de bondad consiste en no reaccionar con maldad aun cuando tenga resentimiento contra alguien quien le ha hecho alguna maldad.
Supongamos que alguien lo está insultando y empujando; y que usted soporta todo esto y no reacciona de la misma forma. Se dirá: "¿Para qué voy a contestar a sus insultos? Dios dice que no debemos de hacerlo. Por eso debo tolerarlo." Por ello, no reacciona con maldad. No obstante, en su interior, le cuesta sobrellevar este resentimiento porque se siente victima de ese maltrato.
Pero como conoce la Palabra de Dios o tal vez por simple educación, se contiene y reprime esos sentimientos. Esa clase de persona tal vez parezca ser exteriormente dócil y buena. Hay gente así en el mundo. Y también la hay en la Iglesia. Sin embargo, a los ojos de Dios esa clase de persona no es buena. Y es porque Dios no mira la apariencia sino el interior del corazón.
Contener el resentimiento es mejor que responder golpe por golpe. No obstante, Dios considera maldad incluso eso. Es porque aun tiene maldad dentro de su corazón. Por ello, aun cuando no devuelve mal por mal, este nivel no es considerado como un nivel de bondad porque todavía tiene maldad en su corazón.
Les comento algo: Cuando reparé mi casa; un vecino me demandó por daños y perjuicios. Decía que las obras que había efectuado habían dañado su casa. Por eso, les dije a los operarios que trabajaban en mi casa que reparaban todo lo que el vecino les pidiera.
En realidad fue él quien causó daños a mi casa cuando reparó la suya. No obstante, no le pedí ningún tipo de restitución. Les dije a mis colaboradores que no le reclamaran nada. Total: Cuando se hacen reparaciones en una casa, eso puede causar algunos inconvenientes. No es algo grave.
Sin embargo, apenas inicie las reparaciones en mi casa, el vecino inmediatamente se comenzó a quejar. Por ello, le dije a los obreros que repararán todo lo que el vecino les pidiera.
Cuando actuamos con bondad, tal vez parezca al principio que perdemos. Pero en realidad no es así. ¿Se imaginan lo contento que se pone Dios cuando reaccionamos con bondad? Dios nos bendecirá. Lo que nos debe importar es la bendición de Dios y no del hombre.
Volviendo al tema: Hoy en día hay algunos que se dicen cristianos pero que se comportan peor que la gente del mundo. Si realmente creyeran en Dios, creerían en Su Palabra. Y procurarían vivir de acuerdo a ella.
Proverbios 8:13 señala "El temor de Jehová es aborrecer el mal; la soberbia y la arrogancia, el mal camino, y la boca perversa, aborrezco."
Dios odia el mal. Temer a Dios es odiar el mal. Y odiar el mal es temer a Dios. Si aborrecemos el mal, podremos vivir según la verdad y la bondad. Y además debemos de odiar la soberbia, la arrogancia, el mal camino y la boca perversa. Por ello, si realmente creemos en Dios, tendremos temor de Dios, odiaremos el mal, y seguiremos la bondad.
Pero si reacciona con maldad, como lo hace la gente del mundo, o si hace lo malo y dice que tiene fe en Dios, eso demuestra que no teme ni cree en Dios.
En Lucas 18:8 última parte: Jesús nos dice "... Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?" Mientras más cerca está el fin de los tiempos, el mundo se llenará más y más de pecado; y resultará cada vez más difícil hallar bondad y cristianos que tengan verdadera fe.
Por ello, si actúa con verdadera bondad en este mundo donde el amor se ha enfriado y en el que la gente reacciona cada vez con mayor maldad, podrá ser luz al mundo y guiar a multitud de personas a la luz. Así podrá glorificar a Dios.
Pero, si sólo reprime su resentimiento, aun cuando no devuelva mal por mal, Dios no lo reconocerá como alguien con verdadera bondad.
La pregunta es: ¿Qué clase de corazón y que clase de hechos son los que Dios acepta como actos de bondad?
El segundo nivel de bondad, que voy a compartir a continuación, es el primer nivel de bondad que Dios reconoce como tal. Hasta ahora les he hablado del primer nivel de bondad. No importa quien me odie o hable mal de mí, no discutiré con esa persona, sino más bien la comprenderé. Este es el primer nivel de bondad.
Sin embargo, Dios no considera este nivel como bondad. Esta es la bondad que la gente del mundo considera como algo bueno. Dios considera bondad a partir del segundo nivel.
¿Cuál es entonces, este Segundo nivel de bondad? Desde luego, no debe tener ningún tipo de resentimiento ni devolver mal por mal. Pero además ni siquiera trata de contener su resentimiento ni su decepción. No tendrá ningún tipo de odio ni sentirá antipatía ni molestia contra otra persona. Eso es no tener maldad alguna en su corazón. Y puede considerarse como un corazón de espíritu.
Este es el nivel mínimo de bondad que Dios reconoce y acepta como tal.
Por cierto, hay pasos a seguir hasta que llegar a este nivel. Cuando somos objeto de alguna maldad, momentáneamente podremos sentir algún resentimiento o malestar en el corazón, aunque no devolvamos mal por mal.
Pero aun en esos momentos, si controlamos nuestra mente y procuramos comprender la situación con bondad, podremos alcanzar el nivel de bondad en el cual no tendremos ningún tipo de resentimiento.
Deberá pasar por este proceso: Olvidar rápidamente el mal sentimiento y cambiarlo por uno bueno. Repetirá este proceso varias veces. Y así no tendrá más resentimiento. Ni siquiera por un instante. Esto lo podemos ver en el caso de José, el esposo de la virgen María. Si otro hombre que no fuera José se hubiera enterado que su prometida estaba embarazada sin saberlo. ¿Qué creen que hubiera hecho?
Hubiera acusado a María de adulterio y la habría castigado conforme a la Ley. O, si lo hubiera aceptado, no se hubiera sentido seguro de su prometida. Hubiera tenido algún tipo de resentimiento, pensando que su novia lo habría traicionado.
No obstante, en Mateo 1:19 se menciona "José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente."
Se imaginan la actitud tan recta y justa de José. Por favor. Hermanos. Intenten por un momento ponerse en la situación de José. José no había recibido el Espíritu Santo. Y sin embargo, tenía un corazón extremadamente bondadoso. Por ello, la Biblia dice que José era un hombre justo; y que había planeado enviar lejos a María para que nadie la acusara.
No la reprendió. Tampoco se enojó con ella. No la insultó. Ni la increpó preguntándole: "¿Cómo es posible que estés embarazada si eres mi prometida?" José sólo quería discretamente enviar lejos a María.
Por esa actitud tan bondadosa de José, Dios pudo decirle que el bebé que María había concebido iba a ser Jesús, el Salvador de la humanidad.
José era bueno y por ello podía oír la voz de Dios. Sólo aquellos que tienen un buen corazón pueden oír la voz de Dios. Una pregunta hermanos: ¿Creen que en este siglo 21 se puede oír la voz de Dios o que eso solo era posible en el tiempo del Antiguo o del Nuevo Testamento? Es lo mismo hoy en día. Únicamente los de buen corazón, los que tienen un corazón lleno de bondad, podrán oír la voz de Dios. Tal vez no muy frecuentemente, pero cuando es necesario, Dios hará que oigan Su voz.
Volviendo a la prédica: Los cristianos deben alcanzar al menos este nivel de bondad. Sólo entonces, el diablo y Satanás no lo podrán tocar y no tendrán que pasar por pruebas ni dificultades. Y no tendrán problemas venir a la Iglesia.
Al respecto, 1 Juan 5:18 menciona "Sabemos que todo aquel que ha nacido de Dios, no practica el pecado,..." Presten atención Hermanos. Dice la cita: "...todo aquel que ha nacido de Dios, no practica el pecado..." Una pregunta: ¿Qué pasa si usted practica el pecado? La Biblia claramente nos dice que: todo aquel que ha nacido de Dios, no practica el pecado: Es decir, si usted peca es que no ha nacido de Dios. Está todavía en las manos de Satanás y del diablo. Continúa el versículo. "...pues Aquel que fue engendrado por Dios le guarda, y el maligno no le toca."
Si vive en pecado, aun cuando venga a la Iglesia los domingos, Dios no lo podrá proteger ni tampoco lo podrá bendecir. No obstante, si alcanza este mínimo nivel de bondad que Dios busca, la oscuridad se alejará de usted por la luz de su bondad.
Hermanos: Yo sé que entienden este principio y que procuran cambiar y llegar al espíritu. De hecho, muchos ya están cerca de este segundo nivel de bondad. Les pido ahora a todos que se examinen y vean si en verdad tienen un buen corazón o no.
Imaginen, por un momento, que le he encargado una tarea. Y que ese trabajo no se ha realizado correctamente debido a una equivocación del grupo de hermanos que está a su cargo.
En este tipo de situación, muchos de ustedes se arrepienten y me dicen: "Rev. Ha sido mi falta. No cumplí correctamente con mi labor." Es muy raro que alguno culpe a otros hermanos o que me de pretextos, procurando evadir su responsabilidad. Algunas veces hay hermanos que hacen esto, pero son la excepción.
Sin embargo, ¿Qué hacen después? ¿Realmente se sintieron responsables y trataron de corregir lo que habían hecho? ¿O tal vez, en el fondo de su corazón, querían culpar a otra persona por el mal rato que acababan de pasar?
Usted admitió su falta. Y aún así quiere culpar a otro hermano por ello. No tiene un buen corazón. ¿Por qué desea culpar a otra persona? Si dice que ha sido su falta, entonces debe examinarse y procurar cambiar.
Usted es el que debe cambiar. Y no sólo cambiar sino también debe procurar hallar la forma de expresar su aprecio y amor al grupo de hermanos o hermanas que colaboran con usted en el ministerio para mejorar su labor y no equivocarse otra vez.
Tiene que encontrar la forma de animar y de mejorar el trabajo de su equipo. ¿Por qué quiere culpar a los demás? ¿No está mintiendo entonces cuando dice que se arrepiente? Aquellos que tiene bondad en su corazón admitirán su falla y se examinarán.
Entonces, Dios les dará gracia y les ayudará para que no vuelvan a equivocarse. Si admite su falta y se esfuerza por examinarse y cambiar para bien, Dios le amará y le dará gracia, favor y fortaleza para cambiar.
Proverbios 12:2 cita "El bueno alcanzará favor de Jehová; mas él condenará al hombre de malos pensamientos."
Hay otra cosa que debe examinar. ¿Cómo se siente cuando ve a otro hermano o hermana que se le llama la atención? Acaso no ha pensado: "Que bueno que le haya pasado eso." O quizás usted mismo también lo ha criticado.
Pregúntese: ¿Se sintió bien cuando regañaron a ese hermano? ¿Se alegró porque se equivocó? Si en verdad tiene bondad, le dolerá el corazón cuando a otro hermano lo critican por una falta que usted cometió.
Aun cuando no sea algo que esté directamente relacionado con usted, debería pensar: "No hubiera sucedido eso, si yo lo hubiera ayudado." Y se lamentará por lo ocurrido. Ahora bien, si lo que ha sucedido tiene que ver directamente con usted, deberá ser honesto y asumir su responsabilidad.
Por eso los que son bondadosos parecen estar pasando por aflicciones y pruebas. No obstante, al final, Dios los bendecirá. Repito: Algunas veces tal vez parezca que los de buen corazón pasan por pruebas. Pero, al final, Dios los bendecirá.
Termino el mensaje:
Amados Hermanos en Cristo y Estimado Público:
Hoy hemos visto el primer y el segundo nivel de bondad.
El primer nivel es cuando no devuelve mal por mal. Sin embargo, lo único que hace es contener su enojo y resentimiento en su corazón. Hermanos. Deben recordar esto. Deben grabar en su corazón lo que les voy a decir.
Quizás saber contenerse sea algo bueno ante los demás, pero ante Dios no lo es. En otras palabras: A partir del segundo nivel se considera en realidad la bondad. Dios considera y reconoce como verdadera bondad a partir del segundo nivel.
En este Segundo nivel, no solo no devolverá mal por mal sino tampoco guardará ninguna clase de resentimiento ni enojo. Digan AMEN si me están entendiendo hermanos.
Por ejemplo: Digamos que enfrenta algún tipo de problema y usted se enoja. Eso significa que todavía tiene maldad en su corazón. Hermano: Debe despojarse de eso. Debe sacarlo y echarlo fuera de su corazón. Sólo entonces, podrá controlar su mente y su corazón.
Sin embargo, hay ocasiones en las que deberá expresar su enojo: Un enojo justo y santo. Porque será producto de la bondad tal como nuestro Señor Jesucristo lo hizo.
El Señor se enojó cuando vio que los cambistas estaban vendiendo en el templo. Hizo un azote de cuerdas y volteó las mesas. Lo hizo porque estaban deshonrando la Casa de Dios. Profanaban el santo templo de Dios.
Y no estaban vendiendo en el interior del templo donde sólo los sacerdotes y el Sumo sacerdote podían entrar, sino en el patio o atrio, donde se efectuaban los sacrificios. Y aun así, el Señor se enojó.
No obstante, actualmente, la gente vocifera e incluso se pelea dentro de la Iglesia. Pecan y hacen cosas indebidas dentro de la Casa de Dios. ¡Cómo se atreven a hacer eso! Están insultando y deshonrando a Dios Esa gente está muy lejos de la bondad. Deberán de arrepentirse una y otra vez. Si quieren romper con la maldición y evitar la ira de Dios, deberán de arrepentirse.
Volviendo al mensaje: El segundo nivel de bondad es aquel en el que no tiene más resentimiento en su corazón. Si llega a este nivel entonces el reino de Dios estará en su corazón. No sentirá ningún tipo de molestia ni incomodidad. Todos los días estará lleno de la gracia y del amor de Dios y tendrá siempre gozo, paz y agradecimiento.
Les he compartido que cuando lleguen al nivel del espíritu, el mismo Espíritu Santo les dará paz y gozo. Y también tendrán una sobreabundante bondad. Si ya tienen esta clase de bondad es que ya han alcanzado el nivel del espíritu.
Satanás ni el diablo podrán tocarlo. Y si pasa por pruebas, serán pruebas para bendición. Si alguien que anda ya en el espíritu, atraviesa por pruebas, esas pruebas lo llevarán a un nivel mayor del espíritu. En el reino espiritual hay niveles. Y para llegar a un nivel superior, deberá pasar por pruebas. Y estas pruebas serán para su bendición.
Una vez que las haya pasado, será bendecido. A través de las pruebas podrá llegar al nivel del espíritu que Dios desea para usted. Solo con bondad podrá superar toda clase de situación. Por ello, luego de la prueba, recibirá el consuelo y la recompensa que Dios ha preparado para usted. Con toda seguridad Dios le recompensará. Entonces, se imaginan el gozo y las bendiciones que recibirán si alcanzan el nivel más alto de bondad.
Espero que puedan despojarse rápidamente de toda maldad y que alcancen al menos el segundo nivel de bondad.
Oro en el nombre del Señor Jesucristo para que en todo momento de su vida Dios camine con usted y lo exalte en el tiempo oportuno.
AMEN