• La dirección que tenemos que tomar - Devocional para los obreros de la Iglesia

    [Salmos 84:10]

    31-01-2010 | Rev. Jaerock Lee

    • Pasaje

      Salmos 84:10
      "Mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos. Escogería antes estar a la puerta de la casa de mi Dios que habitar donde reside la maldad"

      Este es el servicio Devocional para los Trabajadores de la Iglesia del 2010
      Demos toda la gloria y el agradecimiento a Dios Padre quien nos ha bendecido para poder realizar este servicio devocional. Yo también le agradezco a todos los devotos que se han preparado para este servicio con todo su corazón, con toda su mente y con toda su alma.
      Amados devotos, ¿Cuán preciosos consideran ustedes sus deberes? El pasaje de este día en Salmos 84:10 dice, "Mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos. Escogería antes estar a la puerta de la casa de mi Dios que habitar donde reside la maldad". Esta es una confesión que asevera que trabajar en el Templo de Dios es de mayor gozo que trabajar en otro lugar. Es algo muy precioso y bendecido tener un deber otorgado por Dios para servir en el reino de Dios.
      Por ejemplo, el título de diácono no es solamente un nombre otorgado automáticamente a aquellos que han sido creyentes por cierto tiempo y que han alcanzado cierta edad. Éste es un título otorgado a los que cuidan de la iglesia con un sentido de propiedad junto a los pastores y los Levitas.
      En la Iglesia Primitiva, ellos establecieron siete diáconos para que ayudaran con el ministerio de los apóstoles. Ellos fueron seleccionados entre los creyentes de la iglesia primitiva que estaban llenos de fe y del Espíritu, así que, ¡Era prácticamente un honor recibir este título!
      En 1 Timoteo 3:13 encontramos, "porque los que ejerzan bien el diaconado, ganarán para sí un grado honroso y mucha confianza en la fe que es en Cristo Jesús".
      Ustedes fueron escogidos como los guardianes de esta iglesia para evangelizar al mundo y para revelar grandemente la gloria de Dios en este final de los tiempos. Yo les insto a que reconozcan cuán precioso es su deber y cuán grande bendición es poder cumplirlo bien. Ustedes tienen que cumplir con sus deberes teniendo la actitud de un trabajador que ha sido escogido de forma muy especial.
      Por ejemplo, cuando realizamos los eventos de aniversario, ¿Qué clase de actitud deberían tener ustedes?
      Ustedes tienen que tener la misma actitud de corazón sin importar lo que suceda, tienen que tratar de hacer todo lo que puedan para ayudar, tal como si fuera una situación personal o familiar. Cuando oren por los eventos en general y por aquellos que están a cargo, ustedes no orarán solamente por el propósito de orar, sino que oraran por cada detalle con un corazón ferviente. Si ofrecen ayuno de una sola comida, aún cuando ustedes no estén a cargo de nada, ¡cuán valiosa considerara Dios su acción!
      Además, a pesar que ustedes no pueden cuidar de todos los detalles alrededor de toda la iglesia, pueden al menos convertirse en guardianes fieles en su grupo misionero o en el grupo de su célula. Cuando hay recién llegados, no deberían ser desinteresados pensando que ustedes no son líderes de grupos pequeños o de células, sino más bien, tienen que cuidar de ellos como de los miembros de sus propias familias. Y esto es igual para todos los demás que tienen diferentes deberes.
      Si cada uno cuida de la casa de Dios teniendo esta clase de sentido de propiedad, Dios también los considerará muy valiosos. Por otro lado, si ustedes son irresponsables para cumplir sus deberes, esto es en realidad, crear una pared de pecado entre Dios y ustedes.
      En la parábola de los talentos, aquel que simplemente enterró su único talento provocó un gran enojo en su señor. ¿Cómo podemos pedir bendiciones a Dios si somos negligentes con los deberes que Él nos ha dado?
      Especialmente, aquellos que están recibiendo un salario en la iglesia, deberían hacer más de lo que se les ha asignado, teniendo un corazón fiel.
      ¿Que bendición y que gracia es que ustedes puedan concentrarse en los trabajos de Dios sin tener que preocuparse por el trabajo del mundo para ganar su sustento? Hay muchas personas que tienen trabajos seculares pero que entusiastamente realizan los trabajos de Dios en su tiempo libre. Pero si usted es un Levita cuyo amor y fidelidad es menor a la de los miembros laicos, ¿cuán avergonzados estarían por ello delante del Trono del Juicio?
      La pasión que tenían cuando se convirtieron en Levitas no tiene que cambiar. Esa pasión tiene que crecer día con día. Ustedes también tienen que alcanzar la santificación más rápidamente que los miembros laicos para convertirse en fortaleza del reino de Dios.
      Este día, les hablaré de tres aspectos que ustedes necesitan tener y desarrollar para hacer que su fidelidad sea una verdadera fidelidad a la vista de Dios. Dado que se han convertido en trabajadores de esta preciosa iglesia, yo espero que a través de este mensaje ustedes reconozcan la dirección que tienen que tomar, y qué clase de actitud deberían tener en su fidelidad. Al hacer eso, yo oro en el nombre del Señor para que le ofrezcan a Dios la clase de fidelidad que a Él le agrada.

      [Cuerpo]

      Amados devotos, para ofrecer a Dios la clase de fidelidad que a Él le agrada, en primer lugar, tenemos que seguir el orden espiritual y establecer la paz.
      Dios estableció esta iglesia y Él ha llamado a cada uno de ustedes como miembros de este lugar. Él ha estado refinándolos por mucho tiempo para permitir que tengan una medida de fe apropiada para cumplir Su providencia.
      En ocasiones Él permite que subamos montañas ásperas y accidentadas y que enfrentemos fuertes olas. En realidad nosotros tenemos que pasar por muchas cosas que no pueden ser explicadas con palabras. Y a través de esas cosas nuestra fe va incrementando. Muchos de ustedes se han convertido en valiosos obreros que aman a Dios y que le obedecen. Así que, ¿Cuán valioso sería que ustedes cuidaran de cada uno de sus hermanos y hermanas, ya que juntos han pasado por todas estas cosas?
      No todos son perfectos, y aun cuando tengan opiniones diferentes, ustedes tienen que considerar a los demás como miembros de la familia. Entonces podremos ser conciliatorios en nuestras acciones, comprensivos con los demás y procuraremos la paz en todas las cosas.
      Una de las principales causas para quebrantar la paz es ignorar el orden de la iglesia. A pesar que una persona pueda ser muy ferviente en sus deberes, aquellos que quebrantan la paz no pueden ser reconocidos como obreros fieles por Dios.
      Esto es especialmente cierto en esta iglesia, porque la organización y el orden de ella fueron establecidos por los mandatos de Dios Mismo. A pesar que ustedes tengan ideas muy distintas, deberían someterse a este orden. Tienen que contemplar cuál es la voluntad de Dios al establecer este orden, y qué es lo que tienen que hacer en este orden de la iglesia. Aun cuando ustedes son capaces de hacer algo, no tienen que ignorar el orden. Aun si los trabajadores subordinados tienen sabiduría y experiencia, ellos no tienen que trabajar según su propia discreción o indiscreción mientras ignoran a los que están en una posición de mayor autoridad.
      También en el caso de aquellos en posiciones de autoridad mayor, solamente cuando ellos sigan el orden establecido, no ocasionarán incomodidad en los demás. En ningún momento tienen que decir, "Yo soy el director, y haré lo que yo quiera".
      Ahora, si sienten que algo no está correcto en cierto asunto, ¿cómo reaccionan ante ello? ¿Tratan de corregirlo con palabras y acciones amables mientras dependen en Dios con oraciones? O, ¿son de aquellos que con facilidad malinterpretan, juzgan, se quejan y se resienten expresando sus sentimientos de incomodidad? ¿Son ustedes de los que propagan palabras difamadoras que pueden poner a otros en dificultades?
      Al grado en que no hayan llenado sus corazones con la verdad, se volverán impacientes cuando vean algo que no está de acuerdo con su opinión. Por otro lado, aquellos que están llenos con la verdad tratarán de resolver las situaciones con paciencia y amor ante cualquier clase de problema.
      En ocasiones, aun cuando ustedes trabajan correcta y justamente de acuerdo al orden establecido, podrán ser criticados o escucharan quejas por parte de otros. Pero incluso en estas situaciones, al grado en que su corazón esté lleno con la verdad, ustedes tendrán paz en el corazón.
      Cuando lleguemos a tener diez, cien o miles de pacificadores entre nuestros trabajadores, ¡Cuán feliz será Dios! Si ustedes sienten orgullo por haber sido llamados como trabajadores en esta preciosa iglesia, yo espero que cumplan con corazones buenos y dóciles.
      Yo les insto a que siguen el orden todo el tiempo y a ser fieles, en paz.
      Amados devotos, para tener una fidelidad que agrada a Dios, en Segundo lugar, nosotros no deberíamos ver los defectos de los demás sino solamente los puntos buenos y cooperar unos con otros.
      Filipenses 2:3 dice, "Nada hagáis por rivalidad o por vanidad; antes bien, con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo"
      Si ustedes se ponen a sí mismos en los lugares más bajos humillándose, podrán hallar algo que aprender incluso de los más pequeños. Aquellos que en este momento están establecidos como líderes en la iglesia, también parecen tener algunos defectos. Pero Dios sabe los buenos y los malos puntos de cada uno mucho mejor que ustedes mismos. Y Él ha establecido a los líderes de acuerdo a sus talentos para consumar el reino de Dios a través de ellos. Además, a través de esos procesos, Dios los refina para hacerlos más perfectos.
      Por lo tanto, nosotros no deberíamos decir, 'este líder carece de esto y aquello', sino que deberíamos ver sus cualidades. Si ellos tienen algunos defectos, nosotros deberíamos complementarlos y ser de fortaleza para ellos.
      Ustedes han estado escuchando esta clase de mensajes por muchos años. Así que, algunos de ustedes podrán decir que han estado tratando de obedecer lo mejor que pueden. Podrán incluso decir, "Cuando ellos tenían estas fallas, yo traté de quedarme callado, e incluso cuando hubo cosas que no estaban de acuerdo con mis opiniones, yo no le di mucha importancia".
      Pero Dios no está hablando de las apariencias, sino del corazón. Por ejemplo, algunas personas simplemente aparentan estar ayudando al principio, pero debido a que sus opiniones no son aceptadas, ellos simplemente se convierten en espectadores. Y cuando los resultados son negativos, ellos piensan, "¡Ven, yo estaba en lo correcto!".
      ¿Cómo podemos ofrecer una verdadera cooperación con esta clase de actitud? La clase de corazón que Dios desea es aquel que no se rinde solamente porque los demás tienen fallas. Nosotros tenemos que confiar en ellos hasta el final. Aun cuando alguna cosa en particular no nos agrade, nosotros no deberíamos solamente suprimir nuestras emociones, sino que tenemos que cooperar sin tener ninguna clase de desagrado.
      Por supuesto, esto no quiere decir que nosotros deberíamos sobrepasar o dejar a un lado a los que tienen la autoridad, sino que tenemos que ayudarnos unos a otros con nuestros mejores esfuerzos. La razón por la cual ustedes se han convertido en obreros es porque aman a Dios.
      Muchos de ustedes también dicen que están siendo fieles con toda su vida porque aman la iglesia y al pastor. Si su confesión es verdad, no deberían solamente convertirse en uno con el Señor y el pastor, sino también, con todos los demás obreros dentro del sistema del orden.
      Aun cuando no reciban la recompensa o el mérito, tienen que ayudarse unos con otros con toda su sabiduría y con toda su capacidad. Ese es el trabajo de Dios y el trabajo del pastor. Si ustedes tienen esta clase de actitud, no tendrán ninguna base para afirmar que alguien carece de algo. No podrán decir que ustedes están tratando de cooperar, pero que los otros no están haciendo su trabajo.
      Ustedes tienen la actitud de fortalecerse unos con otros para llevar a cabo el reino de Dios, así que pueden confiar los unos en los otros y complementar las fallas de unos con otros.
      Amados devotos, para tener la fidelidad que le agrada a Dios, en tercer lugar, ustedes tienen que desechar la testarudez pensando que son mejores que los demás. Ninguno de ustedes puede decir que solamente ustedes aman al Señor y al pastor. Y ni el Señor ni el pastor son exclusivos para ningún individuo.
      Jesús aceptó a una persona como Tomás tal como él era, a pesar que tenía dudas. Él lo usó para el reino de Dios. Además, a pesar que Juan recibió mucho amor de Jesús, nosotros no podemos decir que solamente él conocía la voluntad de Jesús o que solamente él comprendía perfecta, correcta y completamente Su corazón. No podemos decir que él comprendía el corazón de Jesús solamente porque había estado cerca de Jesús y porque había visto y escuchado muchas cosas. Nosotros podemos comprender el corazón y la voluntad de Jesús solamente al grado en que llenemos nuestro corazón con la verdad.
      Permítanme darles un ejemplo. Supongan que Jesús le hubiera dicho a Juan de antemano que Pedro lo negaría tres veces. Esto no era para que Juan divulgara a otros esta falta futura de Pedro, ni para que odiara a Pedro. Jesús posiblemente habría querido que Juan comprendiera algo o que Juan ayudara a Pedro para que no negara a Jesús. Jesús pudo haber dicho a Juan sobre esto porque era necesario que él lo supiera, cualquiera que haya sido la razón para esto. Pero, después de haberlo escuchado, ¿qué si Juan hubiera abandonado o ignorado a Pedro pensando, "Cómo puede negar a nuestro maestro"?
      O, ¿Qué si Juan divulga estas palabras a los otros discípulos y hace caer a Pedro? ¿Podría haber sido esta la voluntad de Jesús? ¡Por supuesto que no!
      Entonces, habría sido acaso que Juan no comprendió para nada el corazón de Jesús en cuanto a por qué Jesús le había dicho eso. Solamente al grado en que Juan había llenado su corazón con la verdad, él podía haber comprendido el corazón y la voluntad de Jesús, y decir que lo amaba verdaderamente. Por otro lado, aun cuando él era muy cercano a Jesús y veía y escuchaba muchas cosas, puede ser que haya hecho lo contrario a la voluntad de Jesús.
      Esto es igual con ustedes. Ustedes no pueden decir que son hombre de espíritu solamente porque aman al pastor, porque son cercanos a él y porque aprenden muchas cosas de él. Si ignoran o juzgan y condenan a los otros porque han escuchado y visto muchas cosas, solamente están creando muros de pecado con su arrogancia.
      Por lo tanto, primero tenemos que revisar profundamente a que grado hemos desechado la maldad y cuanto hemos cambiado a la verdad. Cuando otros están haciendo algo, ustedes no deberían decir que no es la voluntad del pastor y luego tratar de cambiar el rumbo del trabajo a su discreción. Cada persona tiene diferentes medidas para amar a Dios, y además para amar y comprender al pastor, pero nosotros tenemos que respetarnos unos a otros.
      Tenemos que reconocer que los otros obreros son todos necesarios para el reino de Dios y que ellos son la fortaleza de la iglesia y del pastor. Y ustedes deberían hacer su parte en el lugar que les corresponde, a fin de crear el fluir que Dios desea.
      Amados devotos, para que nosotros seamos verdaderamente fieles al reino de Dios, como dije antes, tenemos que tener paz en la organización. Tenemos que adherirnos al orden y tenemos que estar unidos de corazón y cooperar unos con otros.
      Además, ustedes no deberían pensar que solamente ustedes conocen y aman al pastor, y asimismo tienen que respetar los puntos de vista de los demás. Si realmente aman al pastor, tienen que convertirse ustedes mismos en obreros buenos y espirituales. Tienen que cumplir con sus responsabilidades y hacer que todo funcione adecuadamente manteniendo relaciones buenas y de cooperación con los otros trabajadores.
      Ahora, me gustaría darle algunos consejos a algunos departamentos de la iglesia.
      Primero, el Departamento de Planificación, es el departamento que debería revisar y organizar todo lo de la iglesia en general y hacer que todo se lleve a cabo de acuerdo a la voluntad de Dios.
      Dios nos ha dado los tres campos en la cadena de aprobación para que cumplan este papel. Así que, ustedes deberían revisar qué trabajo no fue hecho realmente de acuerdo a la voluntad de Dios. Ustedes también deberían comprender que en muchos aspectos, no pusieron suficiente atención y se convirtieron en espectadores.
      El Grupo Misionero Internacional y el Departamento de Traducciones, deberían saber que hicieron muchas cosas más allá de su autoridad y que expresaron muchas quejas porque no comprendieron la intensión de Dios en lo que Él había hecho.
      El Grupo del Transporte también tiene que revisar las palabras de su boca. Si ellos desagradaron a Dios en alguna forma con palabras de desconfianza, deberían cambiar ahora.
      La Secretaría y el Departamento de Seguridad, cada uno tiene sus propias responsabilidades dentro de sus deberes. Ellos no tienen que insistir en descartar una misión más allá de su deber asignado. No deberían insistir en su propia área de trabajo. Además, del más alto al más bajo en orden, ellos tienen que revisar qué corazón tan humilde han cultivado. Cuando ellos interactúan con los miembros de la iglesia y con los Levitas y pastores, tienen que decir cada palabra con humildad; ellos no tienen que ser groseros bajo ninguna circunstancia.
      El Departamento de Relaciones Exteriores tiene que considerar el dinero de Dios de forma muy preciada y cada uno tiene que hacer su deber de forma estricta.
      El Comité Financiero tiene que observar el dinero de Dios con buen corazón y con el deseo de ayudar al pastor, de tal forma que no haya ningún desperdicio de dinero.
      A parte de esto, Dios dice a ciertos departamentos que desechen los pensamientos negativos como, "¿Qué estoy haciendo en este departamento, que ni siquiera es reconocido por Dios?" (Departamento de Administración de la Iglesia)
      Además, a otro departamento, Dios dice, ellos tienen que cumplir con sus deberes con un corazón más sincero. (Recepción)
      Ustedes no tienen que entregarme informes equivocados solamente para mostrar su desempeño, o debido a motivos prejuiciados o egoístas.
      A pesar que Dios no habla a cada departamento en detalle, cada uno de ustedes deberían auto examinarse. Yo espero que este servicio devocional no sea una de las formalidades que realizan cada año sino una oportunidad para renovar su determinación y para cambiar.

      [Conclusión]

      Amados devotos, Dios tiene grandes expectativas en ustedes. Él tiene muchos planes para usarlos grandemente en este ministerio de inimaginable poder de Dios y darles grandes bendiciones. Pero para esto, primero tienen que convertirse en obreros que son obedientes a la voluntad de Dios. Tienen que estar listos para que Dios pueda usarlos como Él desea.
      Él ha estado dándoles esta clase de mensajes por mucho tiempo. Nosotros deberíamos haberlos cumplido desde hace mucho tiempo. Deberíamos haber grabado las palabras en nuestro corazón y haberlas cumplido. Pero, realmente no lo hicimos.
      Pero no es demasiado tarde para cambiar nuestro corazón y prepararnos para entrar al Santuario Canaán. Ustedes no deberían simplemente permanecer en el mismo lugar pensando que solamente son hombres de carne. Sino que, debido a que son hombre de carne, tienen que esforzarse más para cambiar.
      Si antes estuvieron quebrantando la paz, deberían decidir no hacerlo en este año y cambiar. Si sus fallas han sido señaladas, entonces tienen que continuar esforzándose con autodisciplina hasta que las arranquen de raíz.
      Yo espero que todos ustedes cambien de acuerdo a este mensaje y se conviertan en guerreros espirituales. Al hacer eso, yo oro en el nombre del Señor, para que las bendiciones del Santuario Canaán que Dios nos ha prometido, sean reveladas delante de nosotros lo más pronto posible.


    • Language
    • x