• Estudio basado en Génesis (54)

    [Génesis 2:15]

    10-12-2010 | Rev. Jaerock Lee

    • Pasaje

      Génesis 2:15
      [15] Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase.


      Amados hermanos y hermanas en Cristo:

      Este es el estudio 54º de Génesis.

      En el último estudio les explique cómo los dinosaurios fueron incitados por Satanás.

      Los dinosaurios envidiaban mucho a los querubines.

      Ya que los querubines escoltaban a Adán, ellos siempre estaban con él.

      La envidia de los dinosaurio fue creciendo más y más, al punto de alcanzar el nivel en el cual se podía deteriorar y convertirse en algo malo.

      Satanás siempre tenía su mirada puesta en el Huerto del Edén, e inmediatamente notó este cambio en el carácter de los dinosaurios.

      Satanás continuó enviando las ondas de pensamientos de falsedad a los dinosaurios.

      Eventualmente los dinosaurios comenzaron a aceptar los pensamientos que Satanás enviaba.

      Luego, los dinosaurios fueron tentados por Satanás, quien dijo a los dinosaurios que ellos podían llegar a ser como los querubines una vez que ellos comieran del árbol de la ciencia del bien y del mal.

      Como resultado de esto, los dinosaurios le pidieron a Adán que les permitiera comer del fruto.

      Adán les explicó por qué no debían comer del árbol, pero no los pudo convencer en lo absoluto.

      Comenzaron a buscar la oportunidad de comer del fruto del árbol.

      Les expliqué todo hasta este punto en el último estudio.


      Amados hermanos y hermanas:

      Cuando los padres dicen a sus hijos que nunca hagan ciertas cosas, hay algunos que intentarán hacerlo con mayor afán.

      Por ejemplo: La madre previene a su hijo diciendo: "No juegues con los fósforos. Puedes quemar toda la casa".

      Entonces ella sale y se va.

      Si su hijo está lleno de curiosidad, quizás pícaramente juegue con los fósforos para prender fuego.

      Pero en cierto momento se convierte en un gran fuego.

      Aunque los dinosaurios fueron severamente advertidos de no comer del árbol de la ciencia del bien y del mal, no podían controlarse a sí mismos, al igual que los niños pequeños.

      El área central del Huerto de Edén, donde se encontraba el árbol de la ciencia del bien y del mal, estaba localizada en un área restringida.

      Adán y Eva tenían acceso al mismo, pero había querubines cuidando para que nadie pudiera entrar a esta área.

      Por lo tanto, no era fácil para los dinosaurios siquiera acercarse al árbol de la ciencia del bien y del mal.

      Un día Adán hizo una visita a gran escala a la Tierra.

      Normalmente Adán no llevaba muchos querubines con él.

      Algunos acompañaban a Adán mientras que los demás se quedaban a cuidar el Huerto del Edén.

      Pero este fue un día especial.

      Adán llevó a todos los querubines a buscar un lugar para construir un edificio simbólico para mostrar su autoridad y dignidad en la Tierra.

      Inclusive él llevó a los querubines que cuidaban el centro del Huerto del Edén.

      Los dinosaurios no perdieron la oportunidad de comer del árbol de la ciencia del bien y del mal.

      El líder de los dinosaurios y otros dinosaurios se juntaron para ir hacia el centro del Huerto del Edén.

      Entraron al área restringida y apresuradamente se dirigieron al árbol de la ciencia del bien y del mal.

      Sin embargo, antes de llegar al árbol, fueron detenidos por Dios.

      Y su provocación se convirtió en fracaso.

      Aunque los dinosaurios no comieron del árbol de la ciencia del bien y del mal, cometieron una violación al traspasar el área restringida.

      Esto despertó la ira de Dios.

      No solo los dinosaurios que entraron al área restringida, sino toda la población de dinosaurios fueron maldecidos.

      La razón por la cual Dios derramó su ira sobre todos los dinosaurios se debió a que todos eran parte de la violación.

      Todos los demás dinosaurios querían que los dinosaurios en posiciones de liderazgo comieran del árbol de la ciencia del bien y del mal y que llegaran a ser como los querubines.

      Ellos anhelaban que sus líderes tuvieran éxito comiendo del árbol de la ciencia del bien y del mal.

      Fue por eso que Dios castigó no solo a los dinosaurios que irrumpieron dentro del área restringida, sino también a todos los demás dinosaurios.

      Dios los juntó en algo parecido a una red, y los puso en diferentes lugares de la Tierra.

      Romanos 6:16 dice: "¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis…-"

      Ya que los dinosaurios obedecieron a Satanás y se convirtieron en sus esclavos, ya no podían vivir en el Huerto del Edén.

      Ahora, ¿hay alguno de ustedes que quizás piensen algo como lo siguiente-

      "Ellos no comieron del árbol de la ciencia del bien y del mal. Simplemente traspasaron el área restringida. ¿No fue muy duro que los hayan echado fuera del Huerto de Edén-"

      "¿No habría sido suficiente si hubieran sido advertidos seriamente que nunca lo volvieran a hacer, y ser perdonados-"

      Sin embargo, no hubiera hecho mucho bien que los perdonaran, porque fue un problema en el Huerto de Edén.

      El Huerto de Edén se debía mantener como un lugar puro y "libre de mal".

      Ya que la maldad no podía ser tolerada, los objetos que tuvieron contacto con la maldad no podían quedarse en el Huerto del Edén.

      Dios creó el Huerto del Edén como un lugar espiritual, puro y limpio; Dios no lo creó para el cultivo de la humanidad como la Tierra.

      El Huerto de Edén no es un lugar donde alguien (o algo) comprende lo que es la maldad y cambia.

      Es un lugar donde todo vive protegido por la gracia de Dios.

      Si el mínimo mal es tolerado, entonces la maldad se convertiría rápidamente en algo incontrolable; ya que es un lugar espiritualmente incultivado.

      Una pequeña brasa ardiente puede causar que todo arda en llamas.

      No era un problema pequeño que alguien recibiera una obra como esta de Satanás en el Huerto del Edén.

      Además, el incidente de la desobediencia de los dinosaurios al mandato de Dios no fue un accidente.

      Los dinosaurios habían aceptado los pensamientos que Satanás les dio por un largo período de tiempo.

      Esto hizo imposible que Dios sea capaz de permitir que los dinosaurios se quedaran en el Huerto del Edén.

      Además, los dinosaurios no fueron creados para ser cultivados como fueron los seres humanos.

      No eran criaturas que podían darse cuenta de su error y apartarse; incluso aunque sean perdonados.

      A diferencia de la Tierra, el Huerto del Edén no es un lugar para experimentar la relatividad.

      Para poder evitar que cualquier forma de maldad haga raíces en el Huerto del Edén, Dios completamente removió todo tipo de forma de maldad existente.

      Así, cuando Adán y Eva luego desobedecieron, Dios también los sacó y los puso en la Tierra.

      Por supuesto, la providencia de la cultivación de la humanidad figuraba allí.

      Por cierto, aquí hay otro punto en el que deberían meditar.

      Quizás piensen: "El Huerto de Edén está rodeado de luz, pero entonces, ¿cómo puede ser que los espíritus malignos como Satanás obraran allí, y cómo los dinosaurios recibieron sus obras-"

      Incluso si alguien vive en el ambiente de la luz, es eventualmente su decisión la de elegir entre la luz o las tinieblas.

      El ambiente es importante, pero lo que es más importante es si al individuo le gusta más la luz o las tinieblas.

      Aunque una persona se quede en un lugar rodeado de luz, si tiene un atributo de las tinieblas en su mente y corazón, puede tener un contacto con espíritus malignos.

      Puede ser movido por Satanás.

      Por ejemplo: Dios protege este lugar, el templo de Dios, con la poderosa pared del Espíritu Santo y con las huestes celestiales y los ángeles.

      Ahora, una vez que ustedes están dentro de este lugar, ¿están libres de cualquier obra de Satanás-

      Hay personas que caen en pensamientos ociosos, o juzgan y condenan a los demás mientras escuchan el mensaje durante el servicio de adoración.

      Además, hay personas que incluso reciben las obras del diablo y realizan las obras de la carne, tales como pelear dentro del templo de Dios.

      Aunque las obras del Espíritu Santo son tan fuertes dentro del templo y, Dios los protege con la luz, hay personas que reciben las obras de Satanás o del diablo.

      Esto es posible, no porque Dios no los proteja, sino porque ellos permitieron contacto con los espíritus de las tinieblas debido a la falsedad en sus corazones.

      Incluso antes de ser santificados, cuando uno es atacado por un pensamiento maligno, el canal de Satanás puede ser fácilmente destruido si inmediatamente lo rechaza.

      Sin embargo, las personas no lo rechazan, sino que lo aceptan, y puede desarrollarse en pensamiento de la carne o en una obra de la carne.

      Los dinosaurios vivieron en el Huerto del Edén el cual está rodeado por la luz. Sin embargo, siguieron adquiriendo atributos de las tinieblas en sus corazones.

      Por eso cuando Satanás los incitó, ellos no lo rechazaron sino que lo aceptaron.


      Amados hermanos y hermanas en Cristo:

      Luego de que Dios pusiera a los dinosaurios en la Tierra, Adán no pudo visitar la Tierra por un buen período.

      Dios no le permitió encontrarse con los dinosaurios.

      Entonces, ¿cómo tomó Adán este incidente con los dinosaurios-

      Yo les dije que los dinosaurio fueron como mascotas para Adán.

      Los dinosaurios cometieron un grave error, la ira de Dios se derramó sobre ellos, y fueron sacados a la Tierra.

      ¿Cómo se sintió Adán con esto-

      ¿Se sintió triste y dolido en su corazón-

      ¿O se enojó con ellos ya que no lo escucharon-

      Adán no se enojó. No estuvo triste ni dolido en su corazón.

      Es seguro decir que la gente del Huerto del Edén casi no tienen sentimientos como tristeza, aflicción e ira.

      Pueden tener sentimientos como alegría y emoción, pero no conocen la felicidad que se siente al sentirlos.

      Es porque no tienen sentimientos opuestos al gozo.

      En otras palabras, los seres en el Huerto del Edén no tienen el concepto de la relatividad.

      Es por eso que Adán no podía darse cuenta cuán serio fue el incidente de los dinosaurios.

      No podía sentirlo mucho en su corazón.

      Hasta ese entonces, Adán nunca había pensado acerca de desobedecer los mandatos de Dios.

      Ni siquiera podía imaginarse hacer algo similar en el futuro.

      Por lo tanto, el incidente concerniente a los dinosaurios no causó un gran impacto en sus sentimientos.

      Adán consideró que el incidente no se relacionaba mucho con él.

      Sin embargo, a través de este incidente él llegó a saber lo que sucedería si el mandamiento de Dios era violado.

      Permítanme darles un ejemplo para ayudarles a comprenderlo de mejor manera.

      Supongamos que hay un estudiante quien nunca se ha enfermado desde el día que nació.

      Un amigo cercano de él se enferma mucho.

      Debido a que su amigo cercano está enfermo, quizás tenga un sentido de simpatía en su corazón, pero no puede llegar a comprender a cabalidad el dolor de su amigo.

      Quizás piense: "Él está enfermo, está sufriendo". Pero no puede sentir verdaderamente el dolor de su amigo en su corazón.

      A lo mejor él ha escuchado acerca del dolor de las enfermedades, pero nunca antes él las ha sentido.

      De la misma manera, aunque Adán fue testigo de la desobediencia de los dinosaurios, su corazón no fue profundamente tocado por las consecuencias de esto.

      Su corazón no recibió la moraleja de la lección del incidente.

      Como resultado, luego Adán también fue por el camino de la desobediencia.

      Hubo también otra razón por la cual Adán no consideró el incidente de los dinosaurios de manera seria.

      Él pensó: "Aunque los dinosaurios fueron expulsados a la Tierra, también ésta está bajo mi autoridad. Una vez que la ira de Dios se calme, puedo ir a la Tierra nuevamente para visitarlos. En el futuro, quizás pueda traerlos una vez más al Huerto del Edén".

      Estaba muy cómodo con la situación.

      Debido a que el corazón y la mente de Adán estaban así, él no se preocupó del incidente de los dinosaurios, tampoco se puso triste.

      Además, mientras pasó el tiempo después que los dinosaurios fueron expulsados a la Tierra, aún los rastros de haberlos echado de menos desaparecieron pronto del corazón de Adán.

      Fue cierto, los dinosaurios dieron gran gozo y placer a Adán, pero la vida sin ellos no trajo muchos cambios a la vida de Adán.

      Adán siguió disfrutando de todo, y vivió una vida que no era realmente diferente a la anterior.

      Algunos de ustedes quizás piensen que es extraño que Adán se haya olvidado de los dinosaurios.

      Ahora, pónganse en los zapatos de Adán.

      Les dije que los dinosaurios eran como mascotas para Adán.

      No eran una necesidad en la vida de Adán. No eran los seres que tenían que quedarse con Adán.

      Además, Adán vivió su vida sin necesidad de cosa alguna desde el principio.

      Por lo tanto, él no consideraba el verdadero valor de todo lo que se le había dado, al contrario, no lo valoraba en lo absoluto.

      El no atesoró lo que tenía, e incluso lo trató todo con indiferencia.

      Aquí hay una buena analogía. Supongamos que hay un niño que nació dentro de un familia muy adinerada. Tenía todo lo que quería y no tenía necesidad de nada.

      Él podía tener cualquier juguete que quería y en la cantidad que quisiera.

      De hecho, podía tener el juguete más caro y más codiciado de todos.

      ¿Cómo se hubiera sentido este niño si uno de sus juguetes se pierde- ¿Cómo creen que él hubiera reaccionado-

      Quizás lo busque, o de repente se pregunte a sí mismo dónde lo dejó.

      Sin embargo, si no lo encuentra pronto se olvidará del juguete.

      Debido a que tiene muchos otros juguetes con los cuales puede jugar, se olvida del que perdió.

      Lo mismo sucedió con Adán luego de que los dinosaurios desaparecieron del Huerto del Edén.


      Amados hermanos y hermanas en Cristo:

      Dios conocía de antemano lo que sucedería con los dinosaurios.

      Entonces, ¿cuál fue la razón por la que Dios, aun así, le dio los dinosaurios a Adán-

      Dios también supo cuando los dinosaurios estaban cambiando.

      Si Dios los hubiera querido detener de antemano, Él lo hubiera hecho.

      ¿Cuál fue entonces la razón por la cual Dios no los detuvo-

      Dios quería que Adán aprendiera una gran lección del incidente con los dinosaurios.

      Primeramente, Él quiso que Adán se diera cuenta del precio que se debía pagar por la desobediencia.

      Él quería que Adán grabara la lección en su corazón; que no importa lo insignificantes que puedan parecer las tinieblas, una vez que se toleran, pueden traer resultados desastrosos.

      Además, Dios quería que Adán indirectamente experimente cómo de manera astuta puede engañar Satanás.

      Así, Él espero que Adán recordara el incidente con los dinosaurios y que luego venciera todo tipo de tentación.

      A propósito, Dios el Padre conocía de antemano que Adán eventualmente desobedecería.

      Sin embargo, hizo todo lo posible para permitirle a Adán que indirectamente experimentara las consecuencias de la desobediencia de antemano, para que él no vaya por el camino de la destrucción.

      El no dejo lugar para que Adán ofreciera excusas.

      Adán no hubiera podido presentar una excusa diciendo: "Padre Dios, Tú ya sabías que acabaría desobedeciéndote, pero con el propósito de la cultivación de la humanidad, de todos modos Tu pusiste el árbol de la ciencia del bien y el mal, ¿no es cierto-"

      Dios el Padre hizo todo lo posible para enseñarle la verdad a Adán, y también es por eso que le dio la oportunidad a Adán de entenderlo.

      Dios el Padre planificó y se preparó para la cultivación de la humanidad siguiendo todos estos procedimientos y procesos.

      No puso Él el árbol de la ciencia del bien y del mal con el deseo de que Adán pecara.

      En vez de eso, Dios le enseñó a Adán a no caer en las tentaciones de Satanás. Intentó que Adán se diera cuenta de eso, y lo protegió.

      Como he dicho anteriormente, Adán no aprendió mucho de esta gran lección con el incidente de los dinosaurios.

      La lección fue: "Nunca deberías desobedecer la Palabra de Dios de esa manera", mas esta no tocó lo profundo de su corazón.

      Adán no comprendió esto en su corazón. Como resultado, él eventualmente cometió el pecado de la desobediencia tal como lo hicieron los dinosaurios.

      La desobediencia de Adán sucedió no porque él no se haya acordado de la palabra de Dios, sino que no entendió en su corazón por qué no debía hacerlo.

      Apreciados hermanos y hermanas:

      Permítanme decirles qué sucedió con los dinosaurios después que fueron puestos en la Tierra.

      Cuando Dios puso los dinosaurios sobre la Tierra, no los puso en un solo lugar, sino que al contrario los dispersó.

      Los envolvió en algo así como una red, y los puso en la Tierra.

      Digamos que había cientos de dinosaurios en cada red.

      Dios colocó estas redes en muchos lugares diferentes sobre la Tierra.

      En algunos lugares, Él puso unas cuantas de estas redes. Pero en otros lugares Él puso pocas o muchas de estas redes.

      Esta es la razón por la cual los fósiles de los dinosaurios han sido encontrados por todo el mundo.

      Los puntos en la pantalla indican los lugares donde se encontraron fósiles de dinosaurios.

      Estos se encuentran dispersos por toda la Tierra, pero algunos de ellos están más concentrados en ciertas áreas.

      Ahora, ¿hay otros animales tan ampliamente distribuidos que pudieron vivir en casi todos los lugares en la Tierra como los dinosaurios-

      No, no los hay.

      Por ejemplo: La mayoría de los leones viven en África y unos cuantos en India.

      El hábitat de los tigres se encuentran en la zona del clima polar hasta el tropical, pero ninguno en el continente de América del Norte.

      Los animales viven en una zona donde el clima es adecuado, pero no es cierto que viven en todas las área de clima apropiado.

      Los fósiles de los tigres pueden ser encontrados en el área del Océano Ártico y en China.

      Los elefantes viven en las zonas tropicales y sabanas.

      Como pueden ver, el hábitat de otros animales no está disperso por toda la Tierra, sino que están mayormente localizadas en ciertas áreas.

      Sin embargo, los fósiles de los dinosaurios, la mayoría de los cuales son más grandes que los de los leones, tigres o elefantes, se encuentran uniformemente distribuidos en toda la Tierra.

      Estos prueba que Dios dispersó a los dinosaurios por toda la Tierra cuando Él los puso sobre la Tierra.

      Les explicaré en el próximo estudio cómo los dinosaurios se degeneraron y qué fue lo que hicieron después de haber sido expulsados a la Tierra.


      Amados hermanos y hermanas en Cristo:

      En este estudio les hablé acerca de cómo los dinosaurios fueron detectados justo cuando estaban a punto de comer del árbol de la ciencia del bien y del mal y de cómo fueron expulsados a la Tierra.

      También les dije por qué Dios le dio a Adán los dinosaurios, aunque Él sabía de antemano lo que harían y en lo que se convertirían los dinosaurios.

      Dios deseó que Adán verdaderamente comprendiera los resultados de la desobediencia y que recibiera un gran lección por eso.

      Yo anhelo lo mismo para ustedes.

      Un hombre sabio, es bueno en aplicar los testimonios o experiencias de las demás personas a su propia vida.

      Éste hombre no las pasa por alto ni las considera como un simple recuerdo así como hizo Adán.

      En el libro de 1 Corintios 10, se enlista los actos malignos que causaron la destrucción de los israelitas (de la primera generación) en el desierto, luego de haber escapado de Egipto.

      En 1 Corintios 10:6 leemos: "Mas estas cosas sucedieron como ejemplos para nosotros, para que no codiciemos cosas malas, como ellos codiciaron".

      Y una vez más en 1 Corintios 10:11 dice: "Y estas cosas les acontecieron como ejemplo, y están escritas para amonestarnos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines de los siglos".

      Espero que ustedes aprendan la lección sobre el incidente de los dinosaurios, y que examinen sus propias vidas.

      Cuando ustedes encuentren el menor indicio de mal, no deben ignorarlo.

      Deberían comprender bien que puede crecer y convertirse en un mal serio, aunque parezca inofensivo.

      Una vez que lo comprendan, deberían orar fervientemente hasta que lo puedan desechar de sus vidas.

      Para la persona que no desecha la maldad, aunque sabe que es algo malo, Santiago 1:23-24 dice:

      "Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era".

      En el verso 25 dice: "Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace".

      Que no se conviertan en personas tontas que entienden sólo mentalmente, sin poner en práctica estos conocimientos, sino que se conviertan en personas bendecidas que entienden en su corazón y lo ponen en práctica. ¡Ruego esto en el nombre del Señor Jesús!


    • Language
    • x