[Génesis 3:2-3]
26-08-2011 | Rev. Jaerock Lee
Escritura
Génesis 3:2-3
[2] Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer;
[3] pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no muráis.
Amados hermanos y hermanas en Cristo:
Este es el estudio No. 70 de Génesis.
En Génesis 3:1 vemos las palabras astutas que Satanás habló por medio de la serpiente para tentar a Eva.
Examinemos ahora la intención de Satanás mientras observamos su tono de voz.
Cuando la serpiente preguntó: "¿Conque Dios os ha dicho...?, lo hizo de manera irrespetuosa.
El tono de voz de la serpiente reflejaba insolencia.
Después de estar en contacto íntimo con Eva durante algún tiempo, habló de forma insolente y condescendiente con ella.
Debido a que Eva estaba siendo llevada a una relación más cercana con la serpiente astuta, no pudo reconocer que la serpiente se volvió arrogante y soberbia.
Ella ni siquiera la corrigió a pesar de que la serpiente desafió el orden.
Como resultado, Satanás pudo extender su influencia y así Eva fue tentada.
Además, ella mismo, Eva, quebrantó el orden sin haberse percatado de ello.
Como ustedes saben según lo escrito en Génesis 2, fue a Adán a quien se le dio la orden de no comer del árbol de la ciencia del bien y del mal.
Todos los animales en el Huerto del Edén debían guardar la orden dada a Adán, debido a que Dios le dio la autoridad a él para gobernar y sojuzgar el Huerto del Edén.
Pero la serpiente le hizo la pregunta a Eva.
Fue Adán quien había escuchado a Dios, pero la serpiente le preguntó a Eva como si Dios le hubiera hablado a ella.
¿Por qué se dio este quebrantamiento del orden?
Fue porque la serpiente causó que la mujer olvidara temporalmente que ella estaba bajo la autoridad de Adán.
La serpiente hizo que Eva sintiera que estaba en condiciones iguales con Adán.
Entonces Eva cambió las palabras de Dios y respondió, lo que causó que luego ella fuera engañada.
Permítanme darles una alegoría para que puedan comprenderlo de mejor manera.
A Tomás se le da instrucciones muy importantes en su trabajo.
Luego él se las menciona a José, quien es un colaborador cercano.
Luego, David llega a enterarse un poco acerca de aquello.
Ahora, David quiere saber un poco más al respecto, entonces va donde José y le dice: "¿El jefe dijo esto...?"
David cree que José recibió las instrucciones directamente del jefe.
En ese momento, José no debería decir que así fue porque David estaría confundido pensando que en realidad fue José quien recibió las instrucciones de parte del jefe.
José tendría que decir: "No fui yo quien recibió las instrucciones sino Tomás; él las recibió directamente de parte del jefe, yo solo te las dije a ti".
Si José tuviera un corazón presumido, puede ser que él presuma sobre la idea de ser lo suficientemente reconocido para recibir instrucciones directamente del jefe.
Además, puede ser que él añada sus propios pensamientos a la voluntad de su jefe.
En el pasaje de esta noche, Eva se encontraba en la misma situación.
La serpiente le hizo la pregunta a Eva de la siguiente manera: "¿Te habló Dios directamente y te dijo...?"
La serpiente colocó a Eva en la misma posición que estaba Adán.
Luego Eva respondió como si hubiera recibido la orden directamente de parte de Dios.
Incluso añadió sus propios pensamientos y cambió la Palabra de Dios.
Eva no quebrantó el orden a propósito.
Sin embargo, ella cruzó una línea que no debía cruzar, la cual la llevó al resultado final.
Apreciados hermanos y hermanas en Cristo:
Ahora demos un vistazo a la manera en la que Eva respondió.
Génesis 3:2 dice: "Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer...".
Si Eva hubiera colocado la Palabra de Dios en su corazón y si no hubiera titubeado ante la tentación de la serpiente, no hubiera sido necesario para ella responder de esta manera.
Habría visto el esquema de Satanás y lo hubiera rechazado con la Palabra de Dios.
Sin embargo, la razón por la que ella respondió de esta manera, fue porque tenía la intención de mostrar que ella quería ganar reconocimiento.
No mal entiendan con este verso que Eva tenía un corazón malo, lleno de 'jactancia'.
Ella no tenía maldad en su corazón, pero tenía libre albedrío para expresarse como lo hizo.
Permítanme presentarles otra alegoría para ayudarles a entender su situación en ese momento.
Hay un muchacho con un orgullo muy fuerte, y usted le dice: "¿Ni siquiera puedes hacer esto?"
Entonces, él no admitirá que no puede hacerlo.
Al contrario, él dirá: "¡Si puedo hacerlo. Incluso puedo hacer esto!"
No admitirá su inhabilidad, y al mismo tiempo, el preferirá demostrar que es capaz de aún más.
Lo mismo sucede con personas adultas.
Cuando a un hombre que es muy orgulloso se le señala sus deficiencias, por lo general no lo admite fácilmente.
Al contrario, intenta que sus puntos fuertes sean conocidos.
Es muy difícil cambiar para este tipo de personas.
Lo mismo sucedió con Eva.
Cuando la serpiente le dijo: "¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto?" Ella respondió: "Del fruto de los árboles del huerto podemos comer".
Al momento que ella respondió de esta manera, bajó la guardia en relación al árbol de la ciencia del bien y del mal sin darse cuenta de aquello.
Al enfatizar que podía comer del fruto de los árboles del Huerto del Edén, el hecho de que el fruto del árbol del conocimiento del bien y del mal era una excepción para ella se tornó confuso en su corazón.
Ahora, ¿qué sucede con nuestro Señor Jesús?
Antes de que Él comenzara con Su ministerio público, Jesús fue tentado tres veces por el diablo.
Cuando el diablo probó al Señor con palabras astutas, Jesús lo refutó con la Palabra de Dios.
Fue cuando Jesús tuvo hambre luego de ayunar por 40 días y 40 noches.
Mateo 4:3 dice: "Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan".
Jesús estaba en la situación que podía parecer que Él no era el Hijo de Dios si no convertía en ese momento las piedras en pan.
Al mismo tiempo, si Jesús hubiera hecho lo que el diablo le dijo que hiciera, hubiera parecido que Él obedecía al diablo.
Lo hubiera hecho un esclavo del diablo.
Si usted no reconoce aquella maldad en el plan del diablo, puede ser fácilmente engañado.
No obstante, Jesús lo refutó directamente con la Palabra de Dios.
Mateo 4:4 dice: "El respondió y dijo: Escrito está: NO SÓLO DE PAN VIVIRÁ EL HOMBRE, SINO DE TODA PALABRA QUE SALE DE LA BOCA DE DIOS".
Él no dijo: "¡Por supuesto que puedo hacerlo!", o "¿no sabes que tengo el poder para hacerlo?"
Jesús en ningún momento tuvo el corazón para ostentar de Sus habilidades.
Del mismo modo, incluso si alguien le habla a usted de una manera para inducirle a hacer algo, no debe dejarse engañar.
No tiene importancia si las demás personas lo reconocen o no.
Usted debe ser considerado justo delante de Dios quien escudriña los corazones.
Además, cuando alguien se le acerca con palabras de falsedad, debe estar dispuesto a discernir correctamente en acuerdo a la palabra de verdad.
Debería ser capaz de despertarlo espiritualmente.
Sin embargo, no estoy diciendo que lo regañe o se queje de manera incondicional.
Si tiene una fe débil, él desconoce la verdad, por eso usted debe explicarle lentamente para que pueda entender.
No obstante, si él está en una posición en la cual no debería hablar así, o si considera que tiene fe, usted debe hacerle entender correctamente.
Es porque otros miembros pueden ser afectados por esta persona.
Eva no tuvo la capacidad de ver a través del plan perverso de la serpiente.
Por lo tanto, ella fue guiada de la manera que Satanás planeó.
Y eventualmente, ella cambió la palabra de Dios quien prohibió el fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal.
Ella dijo, como describe Génesis 3:3: "Pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no muráis".
En ese momento, Eva cambió la advertencia de Dios con respecto al árbol de la ciencia del bien y del mal según su descripción.
Esto significa que no puso bien la palabra de Dios en su corazón.
¿Qué fue lo que dijo Dios?
Como describe Génesis 2:17, Dios dijo: "Mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás".
A estas palabra Eva añadió: "Ni lo tocaréis".
Además, Dios dijo: "ciertamente morirás", pero ella las cambió y dijo: "para que no muráis".
Cuando lo comparamos con "ciertamente morirás", lo que Eva dijo significa 'quizás mueras o quizás no'.
Al ella contestar de esta manera, fue eventualmente atrapada en una trampa puesta por Satanás.
Amados hermanos y hermanas:
Para no ser atrapados por Satanás, deben comprender correctamente la Palabra de Dios.
No deben conocerla solo de manera superficial.
Esto es especialmente cierto cuando se trata de la palabra en relación a la salvación.
En estos días estoy explicando acerca del 'pecado que causa que no sea salvo' y acerca del 'pecado que lo lleva a la muerte'.
Usted debe hacer de estas palabras su alimento y nunca ser engañado; no importa con cuánta astucia Satanás intente tentarlo.
Eva no recordó lo que Dios dijo: "ciertamente morirás", y eventualmente fue llevada a la muerte.
La comunicación espiritual con Dios fue desconectada y ella fue expulsada a la Tierra.
Por supuesto, ella luego se arrepintió y recibió salvación.
La misma voluntad se aplica a ustedes.
La Biblia, la cual es la Palabra de Dios, registra los pecados que causan que ustedes no sean salvos y que los llevan a la muerte.
Y yo se los expliqué para que puedan comprenderlos con facilidad.
Ustedes que son siervos de Dios y obreros que enseñan la Palabra de Dios deben equiparse bien, especialmente con la Palabra.
Es debido a que depende de ustedes si un alma va al Cielo o sufre en el Infierno.
Jesús compara a aquellos que no entienden la Palabra de Dios con 'los ciegos'.
Si los siervos de Dios o los obreros son los ciegos, las almas confiadas a ellos no podrán ser guiadas correctamente.
No solo ellos caerán a un hoyo, sino que pueden causar que otras almas caigan también.
Si Dios dice: "No lo hagan, o serán llevados a la muerte", entonces Sus palabras son la absoluta verdad.
Sin embargo, qué sucede si un siervo de Dios cambia la palabra y dice: "Esta cantidad está bien, aunque usted haya hecho lo que Dios le dijo que no haga, si se arrepiente, Dios lo perdonará. Simplemente no lo vuelva a hacer. Fue algo insignificante, las demás personas hacen lo mismo. Solo no lo haga de nuevo". ¿Cuál será el resultado si él es descuidado por su negligencia de la Palabra de Dios?
No solo el siervo de Dios, sino también las almas que le han sido confiadas a él quizás vayan por el camino de la muerte.
En la Biblia las palabras "no hacer" y "abstenerse" se repiten muchas veces.
¿Por qué Dios repite aquellas palabras en el precioso libro de la Biblia?
Es porque ustedes nunca deberían hacerlo y también deben abstenerse.
De lo contrario se distanciarían mucho de la salvación y alcanzarían la muerte eterna.
Por ejemplo: Hebreos 6:4-6 dice: "Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo, y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero, y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento, crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios y exponiéndole a vituperio".
Además, Hebreos 10:26-27 dice: "Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados, sino una horrenda expectación de juicio, Y DE HERVOR DE FUEGO QUE HA DE DEVORAR A LOS ADVERSARIOS".
Estos versos nos dicen que hay pecados que nunca podrán ser perdonados.
Es el caso de aquellos que han recibido el Espíritu Santo, experimentan la gracia de Dios, y tienen el conocimiento de la verdad, pero pecan voluntariamente y ya no queda más sacrificio por los pecados.
Gálatas 5:19-21 nos dice claramente cuáles son esos pecados.
Dice así: "Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios".
Si las obras de la carne mencionadas son voluntariamente cometidas por aquellos que no son cristianos novatos, sino por aquellos que han recibido el Espíritu Santo, han probado la gracia, tienen el conocimiento de la verdad, no podrán heredar el reino de Dios.
En otras palabras, no podrán ir al Cielo.
Es porque se les da el espíritu de arrepentimiento, pero luego crucifican de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios y lo exponen a vituperio.
De la misma manera que Eva cambió la Palabra de Dios, puede ser que digan: "Quizás no hereden el reino de Dios" en lugar de "NO HEREDARÁN el reino...".
Por otra parte, los miembro de Manmin recibieron una enorme gracia el 25 de diciembre pasado.
En la obra del amor que trasciende la justicia, fueron perdonados de los pecados que llevan a la muerte.
Y ahora, Dios el Padre, está obrando en nosotros con Su luz original.
El rompió los criterios que ustedes no pudieron romper por sí solos, y desechó los atributos de la carne de sus vidas, los cual no podían hacer por sí solos.
Yo creo que ninguno de ustedes ha cometido obras de la carne nuevamente en este tiempo de gracia, ¿no es así?
Espero que todos los miembros de Manmin, no solo en esta Iglesia Central, sino también en las iglesias filiales en Corea y en los demás países, se conduzcan bien en el fluir bendecido del espíritu.
Apreciados hermanos y hermanas:
Espero que ustedes puedan escuchar bien y comprender correctamente no solo la Palabra de Dios, sino también las palabras predicadas desde este altar por el pastor.
Todos ustedes han escuchado la Palabra.
Sin embargo, hay personas que la interpretan a su propia manera y la transmiten a otros.
"El Pastor Principal dijo esto por esta y aquella razón. Por lo tanto, tu no debes hacerlo exactamente de la manera que él lo dijo".
No sean engañados por aquellos que les hablan de esta manera.
A pesar de que ustedes no sean cristianos novatos, si son engañados por escuchar este tipo de palabras, deben admitir que tienen un corazón que no vive por la palabra.
Espero que puedan creer y obedecer la palabra del pastor predicada desde este altar.
Otra cosa más que ustedes deben tener en mente es que deben ser veraces cuando tienen una conversación.
Especialmente cuando hablan acerca de otra persona, no deben mezclarlo con sus propios pensamientos, sentimientos o juicio.
Un hombre bondadoso no debe ser considerado como un hombre malvado, porque no transmite las palabras de manera correcta.
Ni tampoco un hombre malvado debe ser considerado un hombre bueno.
Hasta cuando usted se abstenga de la maldad completamente en su corazón, no podrá discernir los corazones de los demás en su totalidad.
Por consiguiente, si ustedes no tienen un corazón del espíritu, no deberían hablar imprudentemente de los demás.
En el caso que ustedes tengan que transmitir palabras referentes a otra persona, deben decir solo lo que vieron y escucharon.
No deben juzgar y condenar al añadir sus propios pensamientos y sentimientos.
Mientras más tengan el corazón del espíritu, dirán menos palabras innecesarias.
Aunque tengan que trasmitir la verdad, lo harán en bondad y amor para no perjudicar a los demás.
Efesios 4:29 dice: "Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes".
Tal como menciona este verso, espero que las palabras de su boca puedan traer gracia y también ánimo a aquellos que las escuchan.
Ustedes no deben ser atrapados como lo fue Eva, y al mismo tiempo, no deben hacer que los demás caigan debido a sus palabras.
Espero que ustedes solo puedan decir palabras que puedan construir virtud y traer gracia sobre los demás.
Amados hermanos y hermanas en Cristo:
En este estudio expliqué que Eva fue engañada tras la pregunta engañosa de Satanás.
En estos tiempos finales donde el pecado y la maldad están desenfrenados, Satanás obra de manera astuta.
Satanás pone trampas para que puedan ser atrapados fácilmente si no están todo el tiempo despiertos en el espíritu.
Aunque ustedes sean hijos de Dios, mientras tengan falsedad en sus corazones, Satanás intentará tomar ventaja de eso y hacer que caigan.
Por favor recuerden que Satanás puede acusarles en base a las palabras que digan de manera ligera.
No obstante, ya que Satanás obra de esta manera, puede ser que tengan una oportunidad de hallar la falsedad en su corazón y despojarse de aquello.
Si ustedes tienen rencor en sus corazones, y si no lo pueden descubrir porque no hay nada que lo remueva para que sea revelado, ¿será bueno esto?
Si ustedes no se dan cuenta que tienen rencor en sus corazones, no podrán deshacerse de ello.
Mientras tengan ese rencor en sus corazones, Satanás hará todo lo posible para que puedan expresarlo exteriormente y ponerlo en sus palabras o acciones.
La meta de Satanás es hacer pecar de esta manera.
Sin embargo, ustedes pueden darse cuenta de su propio ser, arrepentirse y orar fervientemente para abstenerse del rencor.
Eventualmente podrán abstenerse del rencor, la envidia y los celos.
Esto da a entender que Satanás en realidad juega el papel de hacer que los hijos de Dios sean santificados.
Por lo tanto, cuán necio es Satanás.
¡Ruego en el nombre del Señor Jesucristo, que rápidamente puedan abstenerse de la carne y entrar al espíritu, para que Satanás pueda llorar amargamente por su necedad!