• Estudio basado en Génesis (73)

    [Génesis 3:8]

    16-09-2011 | Rev. Jaerock Lee

    • Escritura

      Génesis 3:8 (LBLA)
      [8] Y oyeron al SEÑOR Dios que se paseaba en el huerto al fresco del día; y el hombre y su mujer se escondieron de la presencia del SEÑOR Dios entre los árboles del huerto.


      Amados hermanos y hermanas en Cristo:

      Este es el estudio No. 73 de Génesis.
      En el estudio anterior vimos que Adán y Eva comieron del árbol de la ciencia del bien y del mal.
      Al comer del árbol, desobedecieron el mandato de Dios.
      Cometieron el pecado de desobediencia.
      En consecuencia, la obra del alma, la cual pertenece a la carne, empezó a tomar lugar.
      Es decir, los pensamientos carnales empezaron a obrar.
      Por causa de estos pensamientos carnales, Adán y Eva poco a poco se profundizaron en la carne.
      Ambos ya estaban alejados de Dios y la relación entre ellos no era como antes.
      Examinemos las escrituras, un verso a la vez.
      En Génesis 3:8 encontramos la expresión 'al fresco del día'.
      Esta quizá nos ayude a entender el curso del tiempo en el Huerto del Edén.
      Digamos que un coreano dice: "En este momento de la tarde la brisa se torna muy fresca".
      Entonces con facilidad pueden saber en qué estación nos encontramos. ¿No es así?
      Simplemente se asume que el verano ha terminado y se acerca el otoño.
      Asimismo, la descripción 'al fresco del día' ayuda a entender el cambio de clima en el Huerto del Edén.
      Primero, algo que es 'fresco' tiene una temperatura baja y moderadamente fría, que es agradable en cierta manera, pero no es muy fría.
      Sin embargo, lo 'fresco' en el Huerto del Edén es un tanto distinto.
      Más bien se refiere al estado en el que uno empieza a sentirse cómodo al igual que la blanda y suave brisa que sopla.
      En el Huerto del Edén sí existe el cambio de temperatura.
      La temperatura sube y baja.
      No obstante, a diferencia del verano o invierno de este mundo, no se torna muy caliente ni muy fría.
      El clima en el Huerto del Edén se mantiene siempre lo más cómodo para que el hombre habite en él.
      La temperatura, humedad, viento y demás son condiciones que están en armonía para crear el mejor clima.
      La temperatura sube o baja un poco dentro de cierto rango.
      Cuando la temperatura sube se la siente 'cálida' y cuando baja se la siente 'fresca'.
      Este cambio de temperatura es periódico; ayuda a la gente a reconocer el curso del tiempo.
      En el Huerto del Edén no existe la noche.
      Ya que está cubierto por la luz de Dios el Padre, únicamente existe el día.
      Por lo tanto, el cambio periódico de temperatura determina el paso del tiempo.
      En ciertos momentos, la gente del Huerto del Edén se moviliza activamente, y en otros momentos descansan.
      Es semejante a nosotros: trabajamos durante el día, descansamos en la noche.
      Cuando se pone el sol y todo se torna oscuro, sabemos que es tiempo de tomar un descanso.
      Las personas del Huerto del Edén saben que deben tomar un descanso cuando el clima se refresca.
      Es por esto que el trasfondo del pasaje bíblico de esta noche es 'el atardecer'.
      Ven ahora que el curso del tiempo, el cambio del clima y muchas cosas más en el Huerto del Edén son distintas a las de la Tierra.

      Amados hermanos y hermanas:
      Génesis 3:8 menciona también que 'el SEÑOR Dios se paseaba en el huerto'.
      ¿Significa esto que Dios mismo bajó al Huerto del Edén y paseó en ese momento?
      ¡No! No significa eso...
      A Dios el Padre no le agrada mucho el Segundo Cielo.
      Esto se debe a que en el Segundo Cielo no solo está el Huerto del Edén sino también el dominio de las tinieblas.
      Y la cabeza del dominio es Lucifer.
      Lucifer solía ser muy amado por Dios, pero un día traicionó a Dios e hirió Su corazón en gran manera.
      Por esto, Dios el Padre evita descender al Segundo Cielo.
      Pero por supuesto, cuando Él manifestó la obra de los seis días de la creación, Él mismo descendió al Primer Cielo.
      Al segundo día, el dominio de las tinieblas se preparó en el Segundo Cielo.
      Desde ese día en adelante, Lucifer y los espíritus malignos permanecieron en el dominio de las tinieblas en el Segundo Cielo.
      Desde ese tiempo Dios el Padre no ha descendido al Segundo Cielo.
      Él usualmente permanece en el Cuarto o Tercer Cielo.
      Entonces, ¿cómo habló Dios con Adán?
      ¿Cómo le fue posible enseñarle a Adán el conocimiento de la verdad?
      Existe un túnel espiritual entre el Segundo y el Cuarto Cielo donde mora Dios el Padre.
      Incluso en este mundo, la tecnología inalámbrica se ha desarrollado extensamente, ¿verdad?
      Se puede incluso hacer una videoconferencia con aquellos que viven al otro lado del mundo.
      La tecnología de la comunicación en el reino espiritual está tan avanzada que la gente de este mundo no la puede imaginar ni imitar.
      Es muy vívida y directa.
      Uno se puede confundir pensando que se está hablando con la otra persona en la misma habitación.
      Por cierto, había otra forma en que Dios Padre podía estar con Adán sin tener que descender al Segundo Cielo.
      Dios separaba de Sí mismo una entidad separada, y enviaba a la entidad.
      Dios la Trinidad puede lograr la separación del Espíritu.
      Hay una entidad original, pero Él puede separarse a Sí mismo en las muchas entidades que desee.
      Respecto a la separación de Espíritu por parte de Dios la Trinidad, expliqué sobre esto en los estudios de Génesis No. 4 al 11.
      Ahora, las Escrituras dicen que Adán y Eva 'oyeron al SEÑOR Dios que se paseaba en el huerto'.
      Fue la entidad separada de Dios el Padre que descendió al Huerto del Edén en ese momento.
      El Espíritu que se separó de la entidad original puede ir a cualquier lugar y la entidad puede convertirse otra vez en una con la entidad original una vez que regrese.
      Lo que la entidad separada mira o siente se transfiere a la entidad original tal como es.
      El Espíritu separado como entidad habla y obra de la misma forma que la entidad original.
      Por lo tanto, aunque Adán escuchó la voz de la entidad separada de Dios, sintió que era la voz de Dios original.
      Por cierto, fue también un caso raro el que la entidad dividida de Dios haya descendido hasta el Huerto del Edén.
      Dios el Padre logra esta 'Separación de Espíritu' solo en ocasiones muy especiales.
      Por lo tanto, si la entidad separada de Dios el Padre desciende, es casi lo mismo que su entidad original descendiendo.
      El caso de la escritura de esta noche fue más bien excepcional.
      Adán y Eva pudieron escuchar la voz de Dios quien descendió al Huerto del Edén como una entidad separada.
      El Huerto del Edén y el Tercer Cielo son parte del reino espiritual, pero sus niveles son distintos.
      Ya que el Huerto del Edén es un reino espiritual imperfecto, el Tercer y Cuarto Cielo son reinos perfectos.
      Aun así, las personas del Huerto del Edén podían ver la imagen de la entidad separada de Dios, así como ángeles y querubines.
      En la Tierra, solamente aquellos cuyos ojos espirituales están abiertos pueden ver los seres espirituales. Pero en el Huerto del Edén todos los pueden ver.
      Sin embargo, Dios el Padre ha permitido que la luz original de Dios sea vista por nuestros miembros cuyos ojos espirituales no están abiertos.
      Él no la muestra como una simple luz brillante y hermosa, sino que añade varias formas e imágenes para que podamos sentir el Cielo.
      Por tanto, ¡deberíamos estar muy agradecidos!
      Anhelo que ustedes se acerquen a Dios mucho más en esta obra suya.
      Ahora, cuando Dios llegaba al Huerto del Edén, ¿cómo reaccionaban Adán y Eva?
      Solían darle la bienvenida con gozo y felicidad.
      Mas en Génesis 3:8 leemos: "...y el hombre y su mujer se escondieron de la presencia del SEÑOR Dios entre los árboles del huerto".
      ¿Por qué se escondieron?
      Porque ya no tenían confianza delante de Dios.
      Esta fue la evidencia de que ellos mismos reconocían que habían quebrantado el mandato de Dios al cometer el pecado de desobediencia.
      (Quizás pensaron:) "Quebrantamos el mandato de Dios; nos dijo que no comiéramos del árbol de la ciencia del bien y del mal, pero desobedecimos".
      Una vez que comprendieron lo que habían hecho, las tinieblas llenaron sus corazones.
      "¿...y si Dios ya lo sabe?"
      Ellos se preocuparon y sintieron temor.
      Es por eso que se escondieron al escuchar el sonido de Dios.
      El profeta Jonás también desobedeció y quebrantó la orden de Dios; esto está escrito en la Biblia.
      Dios le dijo a Jonás que fuera a Nínive y declarara a Su pueblo que el juicio vendría sobre ellos.
      Jonás no quería obedecer este mandato.
      Así que huyó en la dirección opuesta.
      Por esto, Jonás 1:3 dice: "Y Jonás se levantó para huir de la presencia de Jehová a Tarsis, y descendió a Jope, y halló una nave que partía para Tarsis; y pagando su pasaje, entró en ella para irse con ellos a Tarsis, lejos de la presencia de Jehová".
      No importa cuán bueno sea un hombre para esconderse, Dios siempre lo encontrará.
      También vio Dios claramente cuando "...Jonás había bajado al interior de la nave, y se había echado a dormir" (Jonás 1:5b).
      Asimismo, aquellos que creen en Dios tratan de evitar Su rostro cuando desobedecen Su Palabra.
      Es simplemente como si las tinieblas desaparecieran cuando se enciende la luz.
      Las tinieblas aborrecen la luz.
      Si alguien desobedece la Palabra de Dios, ciertamente ha sido incitado por Satanás.
      Aquel fue incentivado por el enemigo diablo y Satanás, y le obedeció.
      En la medida en que realice la obra de las tinieblas, las tinieblas espirituales se convierten en un yeso sobre su corazón.
      Un hombre como este no puede hacer más que esconderse a sí mismo de Dios quien es la luz.
      Cuando se está en un lugar oscuro y luego se sale a la luz del sol, no se puede abrir los ojos con facilidad.
      De la misma manera, mientras más tinieblas tienen las personas en el corazón, más tratan de evitar a Dios y más se alejan de Él.
      Por otro lado, aquellos que viven según la Palabra de Dios quien es la luz, tienen confianza para presentarse ante Él.
      Respecto a esto, en Juan 3:20-21 nuestro Señor Jesús dijo: "Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas. Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios".
      Además, en Salmos 11:7 leemos: "Porque Jehová es justo, y ama la justicia; El hombre recto mirará su rostro".
      También, en Mateo 5:8, Jesús dijo: "Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios".
      Los hijos de Dios siempre deben buscar y mirar el rostro de Dios.
      Deben caminar en la luz en todo tiempo y lugar, de modo que puedan siempre comunicarse con Dios.
      En Salmos 27:8 se nos instruye: "Mi corazón ha dicho de ti: Buscad mi rostro. Tu rostro buscaré, oh Jehová".
      Y Salmos 105:4 proclama: "Buscad a Jehová y su poder; buscad siempre su rostro".
      Nuestros miembros buscarán ahora la gracia de Dios el Padre y Su fortaleza con confianza.
      No debe haber personas que hagan obras que causan que Dios aleje Su rostro para no verlas.
      ¿Hay alguien aquí quien intenta evitar el rostro de Dios al igual que Adán, que se aleja de la iglesia y del Pastor y a quien le desagradan las reuniones con los hermanos en la fe?
      Si es así, deben examinar cuánto han desobedecido la Palabra de Dios.
      Aquellos que viven de acuerdo a la Palabra de Dios siempre desean ir a la iglesia, que es el templo de Dios.
      También aman al Pastor quien predica la Palabra de Dios y desean mantenerse cerca de los hermanos en la fe.
      Anhelo que todos ustedes busquen el rostro de Dios con confianza.
      Anhelo que puedan comunicarse con Dios tal como lo hizo Adán antes de cometer pecado, y que disfruten de gracia y bendiciones sobreabundantes.


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