Escritura

Génesis 3:21
[21] Y Jehová Dios hizo al hombre y a su mujer túnicas de pieles, y los vistió.


Este es el 80mo estudio de Génesis.
Génesis 3:21 dice: "Y Jehová Dios hizo al hombre y a su mujer túnicas de pieles, y los vistió".
Antes de que Adán y Eva fueran expulsados a este mundo, Dios les hizo túnicas de pieles, y los vistió.
Adán y Eva sintieron vergüenza de estar desnudos, y por eso Dios el Padre cubrió su vergüenza.
Esta es la razón carnal por la que Dios les hizo túnicas de pieles, pero también hay un significado espiritual.
Primero: las túnicas de pieles representan el amor de Dios.
Dios el Padre sintió lástima de Adán y Eva que estaban a punto de descender a la Tierra para vivir ahí.
Su corazón estaba lastimado por culpa de ellos.
Como una expresión del amor del Padre que sintió lástima por ellos, Él les hizo túnicas de pieles, y los vistió.
El entorno de la Tierra era completamente diferente al del Huerto del Edén; era distinto incluso desde el día que ellos cometieron pecado.
Esto se debió a que la Tierra también fue maldecida y se deterioró de muchas maneras.
Dios el Padre estaba consciente del impacto que ellos sufrirían por el deterioro de la Tierra, y por el sufrimiento que experimentarían.
Así que, Él hizo túnicas de pieles y los vistió para protegerlos.
En base a esto podemos notar la humanidad cortés de Dios el Padre.
Segundo: las túnicas de pieles representan una 'cuerda de salvación'.
Las túnicas de pieles fueron la 'cuerda de salvación' que conectaba entre Dios y ellos.
Esta implicaba el significado de que Dios el Padre jamás los olvidaría ni dejaría.
Por lo tanto, las túnicas de pieles fueron la cuerda de gracia y de salvación para Adán y Eva.
Después de que ellos llegaron al mundo, no pudieron comunicarse con Dios como antes.
Antes de cometer pecado podían hablar con Dios como que estaban hablándole cara a cara.
Ellos estaban conformados por espíritu, alma y cuerpo, entre los cuales el espíritu era el agente principal, por lo que podían tener una comunicación clara con Dios que es espíritu.
Pero después de cometer pecado, su alma se convirtió en el agente principal.
Aun así, su comunicación con Dios no se desconectó por completo.
Esto se debió a que la fuerza del espíritu no se desvaneció de modo inmediato, sino de manera paulatina.
Mientras se mantenía la fuerza del espíritu, les era posible comunicarse con Dios.
En el cuarto capítulo de Génesis encontramos a Caín, hijo de Adán y Eva, hablando con Dios.
En ese entonces era el principio de la historia humana, y el mundo no estaba tan manchado por el mal.
En la medida en que el pecado y la maldad han acechado el mundo, y en la medida en que el hombre se ha sumergido en la carne, su comunicación con Dios se ha vuelto cada vez más débil.
Estamos en los tiempos finales, cuando el pecado y la maldad prevalecen tanto en el mundo y se hace más difícil comunicarse con Dios.
En esta generación, para comunicarse con Él es necesario tener un corazón puro.
El enemigo diablo y Satanás no debería tener la facilidad de encontrar cualquier terreno para acusar.
Esto se debe a que, para comunicarse con Dios ustedes deben tener autoridad espiritual para atravesar el aire sobre el cual los espíritus malignos tienen el control.
Deben ser santos y perfectos, hasta ese punto.
Así, en Mateo 11:27, Jesús dice: "Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni al Padre conoce alguno, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar".
Solo aquellos que pueden comunicarse claramente con Dios pueden recibir esta 'revelación' de parte de Él.
Dios se 'revela' a Sí mismo ante aquellos que son correctos ante Sus ojos y los del Señor, para que ellos puedan conocer a Dios el Padre.
La revelación que proviene de parte de Dios ciertamente 'se cumple y acontece', tal como está escrito en Deuteronomio 18:22.
La evidencia en verdad se presenta para comprobar que la revelación es la Palabra de Dios.
En otras palabras, la revelación se cumple como se ha dicho.
Adán y Eva se comunicaron con Dios de vez en cuando después de haber sido expulsados a la Tierra.
No obstante, la frecuencia de la comunicación disminuyó poco a poco con el paso del tiempo.
Dios el Padre sabía esto de antemano, por eso hizo túnicas de pieles para Adán y Eva, y los vistió.
Una vez que Adán y Eva se sometieron al cultivo de la humanidad con sinceridad, comprendieron cuán grave fue el pecado de comer del árbol de la ciencia del bien y del mal.
Ellos lograron entender la gravedad de su pecado en la medida en que conocieron el bien y el mal.
"Dios nos amó tanto, pero nosotros desobedecimos Su Palabra. Él nos advirtió mucho respecto a esto, pero ignoramos Sus palabras".
Ellos quizás se lamentaban y desalentaban.
Pero cada vez que eso sucedía pensaban en las túnicas de pieles que Dios les hizo y recordaban Su amor.
"Dios no nos olvidó. Él jamás nos abandonará. La 'cuerda' entre Dios y nosotros aún no está desconectada".
Ellos podían animarse nuevamente y recobrar su esperanza otra vez.
Gracias a las túnicas de pieles que Dios les hizo, las que representaban una muestra de amor y la cuerda de salvación, Adán y Eva pudieron soportar la vida en la Tierra.
Pudieron arrepentirse de su pecado y eventualmente alcanzaron la salvación.