[Mateo 5:1-12]
22-05-2008 | Rev. Jaerock Lee
Las Bienaventuranzas 3
La Escritura: Mateo 5:1-12
1 Viendo la multitud, subió al monte\; y sentándose, vinieron a él sus discípulos.
2 Y abriendo su boca les enseñaba, diciendo:
3 Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
4 Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación.
5 Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad.
6 Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.
7 Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
8 Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.
9 Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
10 Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
11 Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.
12 Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos\; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.
Amados Hermanos en Cristo.
Este es el tercer mensaje sobre las Bienaventuranzas.
Y hoy, les hablaré de la bienaventuranza para los mansos. Mateo 5: 5 dice, “Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad.” Los mansos son bienaventurados pero ¿En que consiste esta bienaventuranza? El Señor dice que ellos heredarán la tierra.
La primera bienaventuranza es para los pobres en espíritu: la segunda es para los que lloran y ahora, nos dice, “Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad.” La frase “pobres en espíritu” o “los que lloran” no deben ser interpretadas literalmente. Debemos comprender su significado espiritual porque es completamente diferente al que entienden los no cristianos.
Asimismo, la mansedumbre a la que se refiere esta tercera bienaventuranza es diferente a la mansedumbre que normalmente se conoce en el mundo. Si busca en el diccionario, se define como “mansedumbre” a la falta de vanidad o presunción: sencillez, humildad, inferioridad y modestia. Y a veces las personas del mundo aplican esta palabra para referirse a los que son reservados, mediocres, faltos de sabiduría, de entendimiento y a los que no se enojan.
Sin embargo, la mansedumbre a la que Dios menciona aquí es muy diferente. La mansedumbre espiritual a la que Dios se refiere consiste en ser virtuoso además de tener un corazón apacible y modesto. Es el corazón que puede aceptar y comprender a muchas personas y donde pueden encontrar descanso y refugio al igual que un gran árbol frondoso produce sombra para que la gente descanse durante el caluroso verano. Significa además un corazón suave y delicado como el cabello sedoso.
Si lanza una piedra contra un objeto de acero, este producirá un sonido metálico y si la arroja contra una ventana, se romperá produciendo un sonido estrepitoso. De igual modo, un hombre lleno del orgullo y con un corazón egoísta reaccionará brusca y alteradamente como un sonido metálico ante una situación que no le guste.
El corazón de los mansos es suave como el algodón. Por eso están en paz con todos en cualquier tipo de situación. Pudieran parecer tontos ante algunas personas, pero tratan a los demás con afecto y cordialidad, porque tienen esa cualidad en lo profundo de su corazón. Pueden aceptar incluso a aquellas personas cuyas acciones no están de acuerdo con sus propios pensamientos y educación y nunca juzgan o condenan a otros con malicia. Pueden comprender las cosas desde el punto de vista de los demás y les sirven con humildad. No se molestan ni causan molestias a otros. No dan la espalda a nadie sino que esperan con mucha paciencia hasta que esa persona cambie su conducta aun cuando tenga una fe débil o tenga maldad.
Cuando venía a la iglesia para este culto, una anciana me pidió que orara por una enfermedad causada por la ira y el odio. Dijo que se enojaba frecuentemente hasta que eso se convirtió en una enfermedad. Algunas personas me han pedido que ore por está enfermedad. Sin embargo, la pregunta es ¿Por qué los cristianos padecen de esta enfermedad? Dios le dice que ame incluso a su enemigo. Le dice que ponga la mejilla izquierda cuando alguien lo golpea en la derecha y que dé también su capa si alguien quiere tomar su túnica. ¡Qué mal educado es alguien que le quiera quitar su túnica! No obstante Dios nos dice, “Al que quiera quitarte la túnica, déjale también la capa.”
Dios le dice que tenga un corazón así, que pueda poner la otra mejilla a los que lo golpean en una de ellas. ¿Entonces, está dispuesto a dar su capa y túnica? ¿Por qué se enoja? Por eso, tiene que arrepentirse con lágrimas antes de recibir la oración. Debe arrepentirse totalmente por tener un corazón malvado que hace que se enfade y que no le permite dar la mejilla izquierda con una sonrisa a aquel que le ha golpeado en la mejilla derecha. Debe poder dar su túnica y su capa y caminar dos millas con amor y paz con los que le obliguen a ir una milla. Debe llorar de arrepentimiento y quebrantar su corazón. Entonces esos arrebatos de ira desaparecerán y será sanado de toda otra reacción producto del odio. Podrá ser sanado cuando se arrepienta con un corazón sincero y cambie su actitud. De nada vale pedir la oración si no cambia primero.
La Biblia dice que bienaventurados son los que lloran. No obstante ello, una hermana estaba llorando desconsoladamente mientras yo oraba por su niño. Hubiera sido mejor que derramara lágrimas de agradecimiento creyendo que su hijo fue sanado. Sin embargo lloró con dolor y pesar. Los que son mansos guían y ayudan a otros si saben el mejor camino para ellos. No se quejan y pelean ni son presumidos sino dóciles y tranquilos y hablan solamente palabras de verdad.
Entienden incluso a aquellos que los odian. No tienen resentimiento hacia otros y no se ofenden por nada. No se sienten ofendidos cuando son señalados sino que lo aceptan de buena gana. Para tener esta clase de corazón, uno tiene que cultivar el terreno de su corazón. La Biblia compara el corazón humano con un campo o terreno. Así como se cultiva un terreno árido, sacando las espinas y recogiendo las piedras, para convertirlo en una buena tierra, usted podrá tener un corazón manso si deja el odio, la envidia, los celos, las peleas, las críticas y el condenar a los demás.
Los agricultores pueden obtener una mejor cosecha solamente después de haber preparado bien la tierra. Por eso, con mucho empeño preparan bien el terreno. Sacan las piedras y arrancan las espinas. Si la tierra está en malas condiciones, traen buena tierra de abono a su campo. La mezclan y obtienen una buena tierra. Ablandan el suelo duro y ponen fertilizantes en el campo. Los labradores se dedican por entero a esto durante un año. Así que, si usted tiene el corazón de un agricultor y trabaja así de duro, no sólo para obtener una buena cosecha sino para cultivar su corazón, y si hace de su corazón un buen terreno teniendo mansedumbre, será lleno de bendiciones. ¿Cómo puede compararse esto con el cultivo de un agricultor?
Recibirá asombrosas bendiciones y respuestas inmediatas a sus oraciones. Los agricultores trabajan constantemente año tras año. Sin embargo si usted logra tener un corazón lleno de mansedumbre, entonces recibirá continuamente bendiciones.
El grupo de Hombres de la tercera edad de nuestra iglesia vinieron a visitarme el viernes y contaron sus testimonios. Algunos de ellos tienen más de 60. Sin embargo, se ven más jóvenes así que tienen mejor vista y fortaleza recibida de lo alto. También hay hermanos de más de 60 años que incluso dicen que tienen muy buena salud como para estar inactivos. Uno de ellos tiene 66, y dijo que siempre ha estado muy atento durante mis prédicas. Esto quiere decir que asiste a los servicios en espíritu y verdad. Siempre me observa atentamente cuando asiste al servicio en espíritu y verdad. La mayoría de estos hermanos de la tercera edad prestan mucha atención cuando predico y de igual modo este hermano también lo hacía. Y casi siempre me miraba directamente a los ojos.
Al cruzar su vista con la mía, la luz de mis ojos entró a los suyos. Y ahora tiene una mejor vista porque me miró a los ojos con un corazón anhelante de Dios. Antes había usado anteojos especiales incluso para leer su Biblia de letras grandes, pero ahora, puede leer letras muy pequeñas sin necesidad de usar lentes. Llegó a tener una vista normal de 1.2 o 1.5.
Hubo un caso similar en el culto anterior. Este hermano tenía una vista muy mala, pero después de la oración de sanidad, su vista mejoró a 2.0. Entonces, dije, “Ahora tiene una vista demasiado buena. Creo que 1.5 es mejor que 2.0. Aunque 2.0 es mejor en número, pero podría llegar a empeorar porque es demasiado buena. El Señor no lo permitirá.” De todos modos, su vista llegó a ser de 2.0. Ese hombre ahora tiene una vista de 1.5 y 1.2 y puede leer letras pequeñas sin necesidad de usar lentes. También me saluda todos los domingos por la mañana. Si. Todos los domingos. Por eso, Dios le dio gracia. Dios obró en él. Así que, ahora está lleno del Espíritu Santo.
Hay un hombre en la Biblia a quien Dios elogió especialmente por su mansedumbre. Ese es Moisés. Números 12:3 dice, “Y aquel varón Moisés era muy manso, más que todos los hombres que había sobre la tierra.” Muchas veces en la Biblia a los que son mansos se les considera como justos. Noé era también un hombre recto en su generación. Moisés durante 40 años pasó por muchas situaciones duras y difíciles mientras guiaba a los israelitas de Egipto a la tierra de Canaan.
Si alguna vez ha estado a cargo de una célula o un grupo de distrito, sabrá que hay diversidad de personas y que se presentarán diferentes situaciones. Si es líder de una célula, tendrá a su cargo de 10 a 20 miembros. Y habrá varias personas que causarán dificultades. Algunas personas se quejarán, señalarán errores, criticarán, causarán divisiones, desobedecerán, crearán falsos rumores, etcétera.
Ahora bien, el número de israelitas que salieron de Egipto fue de casi 2 millones, incluyendo mujeres y niños, ya que el número de hombres era de 600,000. Así que imagínense, ¿Cuántas cosas deben haber ocurrido mientras Moisés estaba guiando a este pueblo por el desierto? Y aun cuando vieron numerosas señales y maravillas por medio de Moisés ya que Dios estaba con él, personas malvadas se quejaron de él cada vez que se encontraban en dificultades. Además de eso, culparon a Moisés por los peligros y problemas que tenían. Clamaron a Dios cuando sufrían en Egipto y Dios los rescató por medio de Moisés. Pero ahora culpaban a Moisés por ser el causante de todas esas cosas negativas. Incluso trataron de apedrearlo.
No obstante, Moisés pudo enseñar a esas personas y conducirlos a la verdad viviendo con ellos durante 40 años. Esto nos habla de la gran mansedumbre de Moisés. Por eso, en la Biblia, Moisés y su sucesor Josué se distinguen por su mansedumbre. Y como Moisés era muy manso, Dios siempre lo respaldó con gran poder y, además, no perdonó a aquellos israelitas que se rebelaron contra él, incluso aun tratándose de su hermano o hermana.
Amados Hermanos en Cristo.
Aquí, debemos distinguir entre la mansedumbre humana y la mansedumbre espiritual. Los mansos espiritualmente son aquellos que han hecho de su corazón una buena tierra. Usted puede producir rápidamente frutos de una buena tierra sin importar lo que siembre. Por eso, podrá alcanzar la santificación muy rápidamente y también producir fácilmente los frutos del Espíritu Santo, el fruto del amor y el fruto de la luz del mismo modo como puede producir en abundancia de una tierra fértil. Asimismo, Dios responderá muy rápidamente a sus oraciones.
Sin embargo, hay muchas personas cuya mansedumbre no es reconocida ni aceptada por Dios aun cuando aparenten ser muy mansos a los ojos de las personas. No darán frutos espirituales en sus almas ni en el cumplimiento de sus responsabilidades. Esto es porque su mansedumbre no es una mansedumbre espiritual. Como les dije antes, la mansedumbre que agrada a Dios no consiste sólo en ser amable, gentil y discreto de carácter.
Algunas personas aparentemente soportan situaciones incómodas, pero dentro de sí están molestas o sólo tratan de ocultar su enojo, de modo que llega un momento en el que estallan de ira luego de tratar de controlarse en muchas ocasiones. Algunos se comprometen con otros y aunque ven que no actúan de acuerdo a la verdad, no se atreven a hacerles ver sus faltas. Otros son de carácter muy calmado y moderado, pero no tienen pasión en sus corazones para dedicarse a sus responsabilidades y obligaciones. Pueden aparentar ser mansos ante otras personas pero sus actitudes no son espiritualmente humildes.
Por ejemplo, digamos que una nuera ha sido criticada y reñida por su suegra por que no hizo bien los quehaceres de la casa, aun cuando se esforzó. Supongamos que su suegra le dice, “¿Por qué aún no has lavado la ropa?” Entonces, le contesta a su suegra con una dulce sonrisa, “Madre, la próxima vez lo haré mejor.” Y luego, entrando en la habitación, le dice a su esposo, “Tu madre me causa molestias. ¿Sabes cuánto estoy sufriendo por su culpa ahora?” Si hizo esto, la sonrisa que mostró a su suegra era fingida.
Moisés fue sin duda también un hombre manso, y sin embargo enseñó muy estrictamente al pueblo con la verdad y los amonestaba fuertemente si pecaban ante Dios. A propósito, Dios me mostró algo muy interesante en un sueño cuando me encontraba en la montaña para orar. Había un niño de 7 u 8 años de edad. Estaba muy sucio. Estaba sucio como un mendigo. Se veía pobre y desaseado. Así que, empecé a lavarlo con agua. Con amor lo lavé desde la cabeza aunque no sabía quién era. Tenía heridas en todo su cuerpo.
Al tocar su hombro, pude notar que estaba cubierto de llagas. Lo lavé cuidadosamente para no lastimar sus heridas ya que me preocupaba que le doliera si las llagas se reventaran. Así que, empecé a lavar su suciedad con agua limpia con mucho cuidado. Pude sentir que era niño era encantador. De pronto, mi esposa se apareció mientras lo estaba lavando. Se alegró mucho al verme hacer eso. Entonces, habló con el niño también con mucho amor. Y estaba muy feliz en ese sueño. Ella no se comportaba así. Si me hubiera dicho, “¿Por qué estás lavando a ese niño tan sucio y mal vestido?”, me habría sentido muy desilusionado. Sin embargo, me sentía feliz de verla tratar al niño con tanto amor. Y después que me desperté, me preguntaba por qué Dios me había dado este sueño. Entonces, pensé, “, Dicen que las personas en un sueño actúan de acuerdo con lo que tienen en lo profundo del corazón. Entonces, Dios me mostró mi corazón. Me mostró lo más profundo de mi corazón acerca de lo que me estaba preguntando, y di gracias a Dios.
Números 12: 7 dice, “[Moisés] es fiel en toda mi casa.” La fidelidad y pasión por el reino de Dios pueden ser reconocidas por Dios. También, aunque Jesús era muy manso, a veces reprendió enérgicamente a los Fariseos y a los maestros de la ley que eran hipócritas diciendo, “¡Raza de víboras!” Volcó las mesas de los cambistas, hizo un látigo de cuerdas, y echó fuera las ovejas y todo el ganado del área del templo cuando encontró hombres vendiendo allí. Volteó las mesas diciendo, “¡Ay de ustedes!” Hizo esto por amor al Padre porque deshonraron el santo templo y al Padre con tales cosas. Los que son realmente mansos no sólo atraen a muchas personas porque tienen un corazón apacible y afectuoso sino que también son más agresivos y valientes que cualquier otra persona si se trata de defender la verdad.
Amados Hermanos en Cristo.
La Biblia dice que los que producen el fruto de la mansedumbre heredarán la tierra. Heredar significa recibir algo de un familiar como un derecho o título reconocido por la ley después de la muerte de esa persona. Anteriormente, la tierra obtenida de los antepasados de esta manera era reconocida como propiedad legal de uno incluso con mayor derecho de la que había adquirido de otra persona.
Por ejemplo, hace mucho tiempo, si alguien declaraba que un terreno era herencia de sus antepasados, la gente reconocía que era suyo y rara vez lo vendían. En zonas rurales, generalmente se acepta al propietario de un terreno. Y el propietario atiende ese terreno con cuidado hasta que lo da a su descendiente. Además, de acuerdo a la ley de Moisés, los israelitas no podían vender las tierras cedidas de sus antepasados. Esto quiere decir que con seguridad podían tomar posesión de la tierra que habían heredado.
Entonces, ¿Que quiere decir “los mansos heredarán la tierra”? ¿Significa que nos enriquecemos al tener muchos terrenos en este mundo? Se dice que es más difícil que un rico entre al reino de los cielos que un camello pase por el ojo de una aguja. No importa cuantas tierras adquirimos en este mundo, no puede ser una herencia eterna o una verdadera bendición. Por lo tanto, heredar la tierra quiere decir que heredaremos una tierra en el reino de los cielos que nunca perecerá.
Entonces, ¿Por qué se dice que los mansos heredarán la tierra? Tal vez, usted podría decir, “¿Hay tierra como la que tenemos en cielo, también? ¡Entonces, debe haber rocas también!” Pero esto no es así. En el cielo, no hay terrenos como los de este mundo. Hay solamente hermosos lugares hechos de oro y otras cosas hermosas. No perecen o cambian. ¿Por qué, entonces, decimos “tierra”? Si la Biblia no dijera “tierra” sino otra cosa que no existe en este mundo, ¿podríamos comprender? ¿Lo entenderían las personas? ¡No!
Digamos que se le conozca con otra palabra usada en el cielo porque es diferente de las tierras en este mundo. Por ejemplo, ¿Que tal si usáramos la palabra perlas? Sin embargo las tierras no son perlas. Bueno, digamos que Dios escribió en la Biblia el nombre con el que se le conoce a la tierra en cielo. ¿Podremos comprenderlo entonces? ¡Por supuesto que no! Así que, para hacernos entender, Dios nos está dando una figura o representación con algo que existe en este mundo. No es como la tierra que conocemos en este mundo. La tierra en el cielo es muy hermosa y no podríamos comprar ni siquiera una pequeña parte de ella sin importar lo mucho que paguemos. ¿Por qué entonces se dice que los mansos heredarán la tierra? Aquellos que son mansos tienen integridad y se ganan el corazón de muchas personas. Por eso, pueden guiar a muchos a la salvación y a la vez enseñar a muchas almas a ser buenos ciudadanos del cielo.
En este mundo, algunas personas podrían estar subordinadas a aquellos que tienen riqueza y autoridad, pero no lo harían de corazón sino sólo exteriormente. La gente por lo general tiende a estar cerca de alguien de gran autoridad o mucha riqueza. ¿Por qué? Porque sólo quieren obtener algo de él. Sin embargo, si esa persona pierde su autoridad, la mayoría lo dejarán. Podríamos decir que incluso todos lo dejarán. Si un hombre rico pierde su riqueza, la mayoría de sus conocidos lo abandonarán.
No obstante, si alguien tiene integridad, las personas se someterán a él con un corazón sincero y serán comprendidas por él. Incluso si esa persona no conoce a Dios, si tiene entereza, por ejemplo, alguien como Confucio, muchas personas serán por aceptadas por él. Nuestro corazón será ensanchado, y esto se conoce como autoridad espiritual. Por lo tanto, se puede decir que aquellos que tienen mansedumbre espiritual tienen autoridad en un sentido literal. Pueden aceptar a muchos y otros encontrarán consolación en ellos. Muchos se pondrán bajo su autoridad y se identificarán con él.
Por ejemplo, si alguno de ustedes, líderes de un pequeño grupo en la iglesia, de una célula, o ministros tiene integridad, el rebaño lo amará y querrá quedarse con usted. Si los líderes son mansos y justos, la iglesia crecerá. Si todos nuestros obreros y ancianos tuvieran virtud, muchas almas serían aceptadas y comprendidas por ellos y la iglesia experimentaría un avivamiento espiritual. Si nuestros ministros, pastores de distrito, de grupos, y los líderes de células estuvieran llenos de amor y de virtud, las almas no lo dejarían.
Los que son mansos, incluso si alguien en su grupo o célula desobedece y los trata mal, no lo hará de lado, ni lo excluirá, o dirán, “Ojalá que este hermano no estuviera aquí.” Lo amarán, lo comprenderán, y orarán por él, y tratarán de enseñarle la Palabra para que se convierta en trigo y no en cizaña. Las palabras que salen de la boca de los mansos e íntegros serán amables y alentadoras. Por eso, el rebaño anhelará escuchar sus palabras y en realidad se edificarán oyendo sus enseñanzas de modo que puedan vivir en la verdad y su fe crecerá.
¿Cómo obedecerían nuestros hermanos si uno de nuestros ancianos fuera muy manso? Lo amarían, lo seguirían, y obedecerían. Muchos hallarían refugio y consuelo en él. Sin embargo, si empieza a lastimar a los demás, se mantendrían lejos de él. Le servirían de mala gana porque es un anciano. Pero preferirían irse. Lo mismo sucedería con los ministros y líderes.
Aquellos que aceptan y comprenden a muchas personas y los conducen a la salvación recibirán grandes y buenas recompensas en cielo. Estas personas lógicamente recibirán imponentes moradas celestiales que son hermosas y enormes. Para construir una casa, necesita un terreno, y aquellos que son mansos tendrán una mayor área. Mientras más mansedumbre y virtud hayan tenido y mientras más personas hayan aceptado, mayor cantidad de terreno les será dado. Sin embargo, los que no son mansos y han tenido una mente estrecha, no habiendo aceptado ni comprendido a los demás, no podrán obtener un buen terreno en el cielo.
Aquellos que van al paraíso, el menor nivel en el cielo, no podrán recibir ninguna propiedad porque sólo se quedaron en el primer nivel de fe. Tampoco se despojaron del mal ni alcanzaron la mansedumbre. Los que van al 1er reino del cielo en adelante, tendrán casas. Sin embargo, el terreno será diferente de acuerdo con la medida de virtud y mansedumbre que tuvieron y en función de la cantidad de almas que aceptaron.
Especialmente, los que van a la Nueva Jerusalén han alcanzado la completa mansedumbre, así que obtienen un gran terreno, y sus casas son grandes y hermosas. Entrar a la Nueva Jerusalén quiere decir que llevaron a la salvación a muchas almas y los guiaron al cielo, siendo fieles en toda la casa de Dios. Por eso podrán recibir una gran morada en el cielo.
Asimismo, podrán tener jardines bien decorados, lagos, piscinas, área de deportes, salones de recepción, colinas, y otros servicios. Usted tendrá todo esto únicamente si tiene un gran terreno. Si en este mundo deja las cosas que tanto anhela, se abstiene de sus comidas favoritas, y renuncia a lo que más quiere por causa del Señor, el Padre le dará todo eso en el cielo.
Y como renunció a lo que tanto quería por causa del Señor, el Padre le dará todo lo que desea tener en su casa en el cielo. De modo que podrá invitar a quienes quiera conocer y a los que guió a Cristo y pasar buenos momentos con ellos. Esta es la bendición prometida a los que son mansos.
Termino el mensaje:
Queridos amigos, ¿Es grande la casa en la que está viviendo ahora? No es fácil conseguir una casa de 200 metros cuadrados hoy en día, mucho menos una mansión de mil metros cuadrados o más. Especialmente en Seúl, es mucho más difícil.
¿Cuánto desea que mida su casa en el cielo? ¿Estaría satisfecho si su casa fuera tan grande como nuestra actual iglesia? Tiene aproximadamente 2,100 metros cuadrados de ancho incluyendo el antiguo santuario. ¿Estaría satisfecho con tener una eterna morada celestial de esa extensión? ¿Hay alguien que diga, “Ni siquiera tengo 30 metros cuadrados ahora mismo. Así que estaré satisfecho en el cielo si tengo 2,100 metros cuadrados?”
Pero incluso ese tamaño no será suficiente para que vivamos ahí para siempre. Aunque nos lamentemos después de entrar al cielo diciendo, “Mi casa es muy pequeña. Debí haber tenido más mansedumbre, debí haber guiado más almas a la salvación, y haberlos entendido mejor para conducirlos al cielo”, ahí será demasiado tarde. Aquellos que se dan cuenta de la importancia de esto, guiarán a las almas, predicarán el Evangelio, y orarán para salvar muchas almas, a fin de obtener mejores y más hermosas moradas en el cielo.
Hace poco, un diácono tuvo una visión del cielo y dijo que la casa del apóstol Pablo era como un gran castillo. No sólo el apóstol Pablo sino también otros padres de la fe tienen grandes y espléndidas moradas parecidas a un castillo. Moisés, que era muy manso, más que todos los hombres sobre la tierra, Elías, Enoc, Abraham, María Magdalena, y la Virgen María tienen este tipo de mansiones, grandes y majestuosas. Incluso en el libro que ha escrito dice que la morada del apóstol Pablo era un gran castillo tan grande que no tenía fin.
Y ya les dije algo similar durante el retiro de verano. Les hablé sobre el castillo. Sin embargo en el cielo, no hay muchos cuyas moradas sean como castillos. Por supuesto, nuestro Señor tiene un castillo. En su castillo, muchos discípulos que lo siguieron son bienvenidos. Los que tienen castillos personales son Elías, Enoc, Abraham, Moisés, el apóstol Pablo, Maria Magdalena, y la Virgen Maria.
Hasta ahora, son 7 solamente. ¡Qué grandes son sus casas! Ellos no están en el castillo del Señor o en otra parte. Ellos mismos tienen castillos independientes al frente del trono de Dios el Padre. El apóstol Pablo era la persona más mansa en los tiempos del Nuevo Testamento. Era el más manso con la mayor virtud. Por eso ha podido recibir un gran terreno. Mírelo. Él es el que declaró, “Estad siempre gozosos. Orad sin cesar. Dad gracias en todo.” El capítulo sobre el amor en 1ra de Corintios fue escrito por él. Estaba lleno de amor. Solamente mostraba agradecimiento incluso padeciendo enormes persecuciones y desprecio. Condujo infinidad de almas al Señor. Así que, es normal que tenga un gran terreno y un inmenso castillo.
En el Nuevo Testamento, casi nadie puede compararse con el apóstol Pablo. Pero espero que nuestros hermanos sí puedan estar a su altura. Es posible. Asimismo espero que algunos de los miembros de nuestra Iglesia puedan conseguir un gran terreno y un castillo personal en el cielo.
¿Por qué solamente Maria Magdalena o la Virgen Maria? Aún hoy en día, Dios está diligente y cuidadosamente buscando a quienes sean mansos como ellos.
De modo que Dios le asigna responsabilidades con el propósito que comprenda a las almas teniendo el corazón de Dios y los guíe a la verdad. Entonces, Dios podrá darle como recompensa una gran morada en cielo. Espero que sea manso delante de Dios el Padre para que pueda recibir una enorme casa como herencia eterna.
Queridos Amigos y Hermanos:
Espero que glorifiquen a Dios en todo lugar a donde vayan dando muchos testimonios y prediquen el Evangelio. Incluso los nuevos creyentes no deben adorar ídolos. Tampoco, ninguno debe ser perseguido por no inclinarse a los ídolos. ¿Por qué debería ser perseguido por no adorar a ídolos? No hay razón para sufrir persecución de parte de su familia. No hay ninguna razón. Hay iglesias en casi todo lugar, incluso en regiones muy apartadas. En cada pueblo, hay una iglesia. Todos han oído hablar de Jesús.
El ex–presidente de Corea y el presidente antes de él son ancianos en sus iglesias. El primer presidente de Corea también era cristiano. ¡Incluso el siguiente presidente! Aquellos que fueron lo suficiente inteligentes creyeron en Jesús, no cualquier persona. La mayoría de nuestros activistas del movimiento para la independencia eran cristianos. Usted debe saber que la mayoría de ellos fueron cristianos incluyendo a Ryu Soon y Kim Ku. Los inteligentes creen en Jesús.
Hay también personas necias pero los que son realmente inteligentes creen en Jesús.
Sin embargo, los que persiguen y molestan creen que solamente los ignorantes asisten a la iglesia porque no saben nada y pueden ser fácilmente engañados. No obstante el creyente sabio obrará correctamente en todo así que no habrá razón para que lo molesten. Por ejemplo, si a usted le dicen que venere a sus antepasados, esa será una gran oportunidad para predicarles el Evangelio. ""Papá, mamá, ¿Cuantos ojos tienen? ¿Cuantas narices? ¿Cuantas fosas nasales?” Pueden ver que los animales y las aves tienen la misma estructura. “¿Es una coincidencia? ¿Evolución? ¿Acaso no fueron hechos por el diseño de Dios el Creador? Creo en Dios el Creador, y que podemos ser salvos, perdonados, e ir al cielo por medio de la fe en Él. De lo contrario, iremos al infierno.”
“Papá, mira a tus vecinos y parientes. ¿Cuántos adoradores de ídolos o fieles budistas que veneran al ídolo de Buda en templos tienen mucho dinero hoy?” Por el contrario, hay muchos de entre ellos discapacitados o que sufren trastornos mentales. Sin embargo los que asisten a la iglesia y sirven a Dios y a la iglesia de todo corazón están sanos y no padecen de ninguna enfermedad. ¡Míreme! Solía estar siempre enfermo antes de creer en Dios, pero desde que empecé a asistir a la iglesia de Manmin, nunca me he enfermado.”
“Creo en el Dios todopoderoso que vive y me guarda sano. Me lleva al cielo. Así que le digo esto con el propósito que usted, padre, madre, y hermano no vayan al infierno.” “La idolatría nos llevará al infierno. ¿Acaso el demonio nos da la vida o nos lleva al cielo? Los demonios solamente nos llevan a la destrucción. Así que, ¿Por qué debemos inclinarnos ante ellos? Debemos inclinarnos solamente ante el todopoderoso Dios Creador.” Usted puede abrir la Biblia y leérselo. Dice, “Sólo a tu al Señor y a tu Dios adorarás.” Lea este versículo en voz alta, “¡Calle en la presencia de Jehová el Señor!” Entonces, el diablo y Satanás temblarán y no podrán actuar. Tendrán mucho temor. Puede abrir la Biblia y leerlo. Luego diga “¡Calle en la presencia de Jehová el Señor!” en el nombre de Jesucristo.
¿Entonces quién se atreverá a perseguirlo? Por el contrario, dirán, “No me prediques el Evangelio. Puedes tener tu propia fe. Es suficiente para mí. Puedes creer en lo que quieras.” Ni sus padres, ni nadie lo molestarán. Si es perseguido es porque no predica el Evangelio. Si su esposo o esposa lo persigue, usted puede enseñarle la verdad. Luego, sírvale como debe ser en las cosas que debe servirle. Sin embargo no debe obedecerle si le dice que no asista a la iglesia el domingo. A menos que se trate de otras cosas, sírvale bien. Por eso, si ellos en verdad notan que usted ha cambiado, ¿Acaso cree que su esposo o esposa le impedirán ir a la iglesia Manmin?
Usted debe predicar el Evangelio y ser la luz del mundo. No debe dejar que lo opriman. Cambie la situación en esta oportunidad. No acepte ningún tipo de persecución.
¡Oro en el nombre del Señor que sea lleno de la paz, del gozo, del amor y de la protección de Dios Padre el todopoderoso!
Amen