[Mateo 22:37-39]
11-05-2014 | Rev. Jaerock Lee
Pasaje
Mateo 22:37-39
"Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas".
Amados hermanos y hermanas en Cristo
Demos todo nuestro agradecimiento y la gloria a Dios Padre quien nos ha bendecido para ofrecer este Servicio Devocional de Mujeres del 2014.
Amados devotos,
En Cada servicio devocional del año, ustedes han entregado todo su corazón, voluntad y sinceridad.
Muchos de ustedes han dado testimonio de las bendiciones que han recibido por medio de los servicios devocionales.
Dios desea que su devoción no los guíe solamente a este nivel de bendición, sino a producir mayores y más completos frutos.
Es por eso que este mensaje es entregado a ustedes.
Él realmente desea que amen a Dios con todo su corazón y muestren una verdadera devoción por Él.
Por medio de este mensaje, deseo que todos ustedes revisen si han amado a Dios con todo su corazón y si han ofrecido sus vidas con todo su corazón.
Oro en el nombre del Señor para que realmente puedan ofrecer un dulce y bello aroma a Dios Padre.
[Mensaje Principal]
Amados devotos, hermanos y hermanas en Cristo,
Amar a Dios con todo su corazón es alcanzar la bondad.
¿Recuerdan ustedes el título del servicio devocional del año anterior para la misión de mujeres?
Si participaron en el servicio devocional con todo su corazón, tienen que haber tenido anhelo por el mensaje.
Tienen que adorar a Dios en espíritu y en verdad, y mirar en su interior con los tres puntos principales del mensaje.
Si son conmovidos por el mensaje, tienen que guardarlo en su mente y cumplirlo en oración durante el siguiente año.
Si se han preparado para el servicio con toda sinceridad pero no pueden conservar el mensaje en su mente, esto significa que fallaron en obtener el punto más importante.
El mensaje del servicio devocional de la misión de mujeres del año pasado estaba titulado como "bondad".
No solamente el año pasado sino cada año Dios nos ha dado un mensaje concerniente a la bondad en el servicio de la misión de mujeres.
Si ustedes han ofrecido su servicio devocional con toda su sinceridad, ¿cuánta bondad han alcanzado en su corazón?
Aquellos que han recibido su nivel de fe, pueden descifrar su bondad por medio de su nivel de fe.
Aun cuando no hayan recibido su nivel de fe, pueden revisar su bondad con unas pocas preguntas por medio del mensaje compartido a ustedes desde el altar.
¿Están buscando el beneficio de los demás? O ¿están buscando su propio beneficio?
Cuando otros prosperan, ¿se están regocijando tanto como si fuera su trabajo? O, ¿están hablando mal de ellos, diciendo, "Esa persona carece de este y este otro aspecto, pero por qué es prosperada?", o ¿se desaniman?
Cuando alguien los golpea en la mejilla derecha, ¿tienen el deseo de presentarle la otra mejilla a fin de tener paz con esa persona?
Cuando alguien los demanda y les quita su capa, ¿tienen el corazón para ponerse en el lugar de esa persona y darle incluso la camisa?
Cuando alguien les hace pasar por un mal momento, ¿se quebranta la paz de su corazón?
¿Están hablando palabras puras y santas para que de esta forma cada palabra que salga de su boca pueda llevar la fragancia de Cristo?
O, ¿están hablando palabras negativas de disgusto, queja e incredulidad, y así provocando malos ratos a las personas alrededor suyo?
Si aman a Dios con todo su corazón, incesantemente examinarán sus palabras y sus acciones.
Estarán cambiando continuamente, revisando si sus palabras fueron buenas y si sus pensamientos fueron apropiados a la vista de Dios.
Algunas personas, incluso teniendo el conocimiento de la verdad, piensan y actúan en una forma opuesta a la bondad.
Supongan que un miembro de la iglesia tenía anhelo por recibir el nivel de fe y ha hecho todos los esfuerzos para lograrlo, pero no obtuvo el resultado esperado. Ahora esta persona está queriendo que Dios se sienta frustrado.
Ella dice, "Esta persona puede ofrecer una gran cantidad en su ofrenda porque su esposo seguramente está manteniéndola. Esa persona tiene pocos años de fidelidad pero obtiene gran favor con su innato buen corazón. ¿Por qué es mi corazón tan pequeño?".
"¿Por qué es mi entorno tan pobre? Yo tengo una pequeña ofrenda porque tengo poco dinero. No tengo a nadie que me ayude a llegar al espíritu rápidamente".
De esta manera ella se desanimaba atribuyendo todo a su entorno, a los demás y a su propio corazón.
Debido a que tiene compasión de sí misma, no puede recocer cuán lejos están sus pensamientos de la bondad.
Si ustedes están espiritualmente despiertos, pensarán en la posición de María Magdalena por un momento y podrán escoger el camino de la bondad.
Aun si escuchan muchos mensajes, anhelan la gracia y tienen un corazón ardiente por entrar al espíritu, no se puede decir que ustedes tienen un verdadero anhelo por convertirse en una persona de espíritu.
Ustedes tienen que meditar en la palabra oída y hacer todo esfuerzo para convertirse en una persona de bondad.
Así es como tienen un verdadero anhelo por el espíritu y aman a Dios con todo su corazón.
Hay una cosa más que tienen que recordar.
El criterio de juicio de Dios es diferente al criterio humano.
Éxodo 15:26 nos dice que nosotros deberíamos hacer lo correcto no a nuestros ojos sino a los ojos de Dios.
De igual manera, la bondad que las personas reconocen es diferente de la bondad reconocida por Dios.
Algunos de ustedes parecen dóciles y educados a todos los demás, pero pueden tener un corazón que desprecia a otros.
Cuando la educación de alguien más entra en conflicto con la de ustedes, podrán pensar que esa persona es falta de educación y grosera, y cierran su corazón hacia ella.
Algunos otros tienen un temperamento introspectivo y no les gusta tener disputas con los demás. Por consiguiente no insisten en sus propias opiniones y siguen el consejo de otros.
Pero esto sucede solamente a causa de su personalidad. Ellos no sirven de corazón a los demás.
Ellos podrán pensar, "Pareciera que yo siempre pierdo al guardar la paz con otros", y sus malos sentimientos de frustración e incomodidad se agravan.
Ellos también podrán tener problemas descubriendo su maldad porque piensan que sirven y ceden el espacio a otros.
Dicen que están pasando por pruebas pero no pueden pasarlas con gozo y agradecimiento.
Si ustedes sufren persecución a causa de la fe y pasan dificultades financieras con fe, esperanza y amor, entonces sus rostros estarán cubiertos con una gracia mayor.
Pero debido a que se reprimen y se limitan durante las pruebas, el sufrimiento aumenta en la medida que han llegado los momentos difíciles.
Sus rostros muestran melancolía y tintes de ansiedad.
Ellos creen que han resistido bien durante años, pero la puerta de las bendiciones no es abierta tan rápidamente como esperaban.
Existen otros que parecen sinceros, diligentes y sociables con los demás.
Ellos parecen hacer los trabajos de los demás como si fueran propios.
Son alabados entre los demás, pero tienen solamente un pequeño anhelo por el espíritu.
Como Marta, ellos tienen mayor interés en sus deberes que en amar a Dios y santificarse. Creen que tienen bondad y que están sirviendo a otros.
Pero todo esto pertenece a una bondad carnal.
Podrán ser considerados como buenos por los estándares de los demás y ellos mismos creen que son buenos, pero Dios no reconoce su bondad.
Si ustedes quieren amar a Dios con todo su corazón, tienen que buscar la bondad en cada aspecto y reconocer lo que es la bondad de Dios y alcanzar tal clase de bondad.
Amados devotos, hermanos y hermanas en Cristo,
En segundo lugar, ofrecer todo a Dios con todo su corazón es alcanzar el amor espiritual.
1 Juan 4:21 dice, "Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano".
Algunos creyentes parecen darle a Dios lo que es de ellos con fervor, pero no hacen nada por otros creyentes.
Ellos oran fervientemente, asisten a los servicios de adoración diligentemente, y dedican su tiempo y dinero a Dios.
Pero extrañamente fallan en considerar y cuidar de las personas alrededor de ellos.
Le han dado a Dios muchas cosas que ellos tienen, pero no pueden producir frutos completos de bendición.
Por supuesto, ellos no tienen intención de hacer daño a los demás ni ocasionar mal en contra de otros.
Ellos son de visión corta al considerar a los demás y el carácter de su corazón no abarca tanto.
Por consiguiente, pueden ocasionar daño al corazón de otros y les provocan molestias a los demás, aunque no es intencional.
Permítanme darles un par de ejemplos.
Alguien tiene un anhelo ferviente por el espíritu y diligentemente ora y ayuna.
Ella se ofrece como voluntaria en diferentes obras y entrega muchas ofrendas a Dios.
Pero mientras ora, no ora lo suficiente por las almas ni por el reino de Dios.
Ella parece tener un anhelo por el espíritu, pero no tiene el deseo de estar con muchas personas a su alrededor.
Algunos miembros que la rodean no recibieron su nivel de fe y están ofreciendo oraciones con lágrimas. Pero, ella recibe la noticia de su nivel de fe.
Ahora da su testimonio sobre su fe con gozo diciendo, "Yo no he hecho nada bueno, pero Dios me dio un buen puntaje en Su inmenso amor."
Ella está tan llena de gracia y de gozo que falla en tomar los sentimientos de los demás y ponerlos en consideración.
Por el contrario, mientras está sufriendo dificultades, expresa su sufrimiento al más alto grado y pasa vergüenza delante de otros.
Ella no se da cuenta que está ocasionando que los demás sientan lástima y se sientan avergonzados.
Permítanme darles otro ejemplo.
Un grupo misionero es dividido en grupos pequeños para limpiar un espacio grande.
Un grupo termina limpiando su área un poco antes que los demás. Los otros aún continúan limpiando.
Si ella tuviera un corazón amplio, podrá reconocer por qué los otros grupos no han terminado y ver qué aspectos necesitan ser atendidos para finalizar.
Aquellos que tienen poco amor espiritual no pueden considerar una situación desde el lugar de otros.
Gálatas 6:2 dice, "Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo".
La Escritura de este día dice, "Amarás a tu prójimo como a ti mismo", y otro versículo dice, "en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis".
Les pido que cuiden de muchas otras personas con delicado amor y amplios corazones.
Deseo que ustedes acojan muchas almas con amor, generosidad, y con el corazón del Padre.
Así es como pueden ustedes amar a Dios con todo su corazón.
Amados devotos, hermanos y hermanas en Cristo.
Amar al Padre con todo su corazón, en tercer lugar, es cumplir con sus tareas asignadas por Dios.
Aquellos que aman al Padre no solamente tienen esa clase de amor en su corazón, sino que llegan a expresar ese amor externamente.
Ustedes llegan a consagrarse al reino de Dios diciendo, "¿Qué puedo darle a mi Padre? ¿Cómo puedo retribuir esa gracia?".
Aún sin un título en la iglesia, ustedes pueden evangelizar y cuidar de otros miembros diligentemente, y ser voluntarios en los ministerios de la iglesia.
Pero algunos de ustedes podrán perder ese estado de fervor con el paso del tiempo.
Es decir, su fervor se enfría.
Entonces, se apartarán de las obras que no les han sido encomendadas y desearán más libertad personal.
Parecen cumplir con sus tareas visibles arduamente pero rechazan otras actividades.
Cuando se les pide que sirvan como ujier o recolector de la ofrenda en el santuario principal, lo harían con gozo. Pero cuando se les pide servicio voluntario en la guardería el gozo disminuye.
Nuestras tareas asignadas por Dios, grandes o pequeñas, tienen que ser cumplidas no a la vista del hombre sino solamente a la vista de Dios.
No tienen que ser cumplidas con obras solamente sino también con fe, esperanza y amor, y con el aroma del corazón.
Imagínense la elección anual, ustedes desean ser seleccionadas como presidenta de su grupo pero obtienen el cargo de secretaria.
Si ustedes sirven fielmente como secretarias con todo su corazón, podrán ofrecer un más bello aroma a Dios.
Entonces, podrán regocijarse y dar gracias simplemente por el hecho que les fue confiado el título de secretaria o gerente.
Orarán y tomarán a su cuidado un grupo de miembros, apoyando a la presidenta del grupo laboriosamente.
¡Cuán hermoso sería este corazón a la vista de Dios!
Supongan que alguien solía ser la presidenta del grupo pero este año ella no fue elegida en ese cargo. Y por consiguiente, no asiste más a las reuniones de grupo y se aparta del servicio. Esto significa que su servicio anterior no fue un verdadero servicio.
Miembros de la Misión de Mujeres han estado realizando muchos trabajos dentro de la iglesia.
En todos los eventos y festivales de la iglesia, ellas están cumpliendo con muchas funciones tales como decoración y cocina.
Ellas hacen huevos decorados de pascua y kimchi o encurtidos de invierno para ayudar a los pobres y participar en el bienestar de la sociedad y de los abandonados.
En cada evento y actividad les pido que sirvan no solamente en el cuerpo sino también háganlo con todo su corazón por Dios.
Entonces, no cumplirán con esas tareas solamente con un sentido del deber.
Más bien pensarán y orarán de la siguiente forma, "Pueda el gozo de la resurrección ser entregado a muchas personas con estos huevos de pascua". O, "Pueda el amor del Señor ser propagado a muchas personas con este kimchi".
Cuando ustedes sirven con fe y amor de esta manera, pueden llegar a estar llenos de gracia y del Espíritu.
Cuando limpian las cortinas del santuario y sacuden y limpian el piso del santuario, podrán sentirse felices y dar gracias por servir en el templo de Dios.
Este corazón de servicio puede ser aceptado como la fragancia de gozo por Dios.
En el nombre del Señor les pido que consideren todas sus asignaciones entregadas por Dios como preciosas y las cumplan con todo su corazón.
Amados devotos, hermanos y hermanas en Cristo,
Proverbios 31:30-31 dice, "Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; La mujer que teme a Jehová, ésa será alabada. Dadle del fruto de sus manos, Y alábenla en las puertas sus hechos".
Dios no ve la apariencia de las personas.
Él acepta la fragancia del corazón, el aroma del temor reverente y lleno de amor a Él.
Su favor y dedicación temporal a este servicio devocional no es suficiente delante de Dios quien ve lo profundo del corazón de cada persona.
Ustedes tendrán que conservar este mensaje y la gracia de Dios en su mente y vivir una vida dedicada durante todo el año.
Cada día, su bondad y amor tiene que incrementar y ustedes tienen que considerar sus deberes asignados por Dios como algo precioso.
Solamente entonces Dios aceptará este servicio devocional con gozo y les recompensará con abundantes frutos de acuerdo a lo que han sembrado y hecho.
Esto no termina solamente en esta tierra. Sino que en el Cielo ustedes serán recompensados con alabanzas, honor y gloria.
Yo deseo que ustedes devotos y todos los miembros de la iglesia amen a Dios con todo su corazón, toda su alma y toda su mente.
Puedan todos ustedes ser exaltados y elogiados delante de una multitud de gente cultivada por Dios en el Gran Juicio del Trono Blanco, ¡Yo oro en el nombre del Jesucristo!